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El día siguiente Domingo, consulto a sus amigos casi hermanos del alma; Angelo, Aioria y Kanon, y como típicos amigos se emocionaron por el, pero en un momento los cuatro dudaron el por que ni tenia el "Atte." la releyeron una y otra vez, hasta que comprendieron.

—Hace cuanto no abres este cuaderno? Aún se ve nuevo—menciona Aioria—

—...no tengo la mínima idea, ya ni me acordaba que lo tenia aquí—responde—

—Ya veo...esta carta por la manera en la que lo escribió es del primer día de clases, osea que ya tiene DOS MESES!!—grita exasperado—

—¿Que? ¿D-dos meses?—exclaman Angelo y Kanon—

Milo sintió como una corriente eléctrica recorrió su espalda, corrió a su cuarto por las demás cartas poniéndolas en el orden correspondiente.

Cartas para MiloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora