๛• ∂αγ 23 ·࣭̣࣪̇⸱

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Despedida. 

Mención al Staxxby

Fargan no era el empleado ejemplar, simplemente porque tampoco ponía empeño en su trabajo. Siempre había pensado que empezaría por lo más bajo, algún limpiador, un recepcionista de un Burger King o uno de esos que vendían empanadas en la esquina. Por esto mismo, nunca pensó hacerse cartero ni llevar estancado en ese cargo por un año y medio.

Aquella mañana no parecía diferente de cualquier otra. Se levantó tarde, no pudo ducharse por las prisas y casi atropello, manejando su bicicleta, a una ancianita... como todos los días.

Karmaland no era un pueblo muy grande, algo que le daba su toque como pensaba Fargan. La atmósfera de humildad y naturaleza abundaba en aquel pueblo, además, al ser tan pequeño Fargan no tenía tantas cartas que entregar. Efectivamente, cuando fue a recoger la correspondencia que debía entregar apenas eran tres cartas lo que le robo una sonrisa, hoy no debía trabajar mucho.

Mientras salía a entregar con cartas en mano se dio cuenta que una de ellas tenía una dirección algo peculiar, intento recordar por donde quedaba aquella calle que citaba en el sobre y se dio cuenta que aquella dirección estaba por la afueras del pueblo, específicamente en aquella colina donde una casa, con un gran domo , se imponía. Dejó escapar un gruñido cuando se fijó en las escaleras que llevaban hacia la casa, definitivamente aquello sería una larga caminata.

Decidió sabiamente dejar por último aquel sobre y cuando termino de entregar las dos cartas restantes, se encaminó por las escaleras. Cuando pudo asomarse para observar un huerto de patatas y su meta, el buzón, se encontraba intentando recuperar el aire ¿No había algún lugar para firmar sobre la necesidad de ascensores? ¿O autos?

Miro de reojo aquella casa, obviamente no era una casa cualquiera, e incluso Fargan se atrevería decir que parecía más una mansión en el paraíso cuando al llegar a la puerta miro atrás viendo una grieta que dejaba ver un árbol blanco.

Para sorpresa de Fargan el dueño de la casa salió, tal vez pensando que era algún tipo de visitante.

- Buenos días

- Buenos días señor - saludó alegremente Fargan, recomponiendose del anterior esfuerzo - solo venía a dejarle una carta, perdón si le traje algún problema.

El otro hombre asintió como respuesta y agarró el sobre que le extendía Fargan. En ese mismo momento rasgó el sobre para leer su contenido pero Fargan no vio sus ojos desplazarse entre las líneas, solo ahí, quietos. En un momento el chico con mascara de búho se sintió extremadamente incómodo ¿debía irse así como así o debía despedirse?

Con una mirada de soslayo se dio cuenta que el chico tenía los ojos aguados. Una parte racional de él quería salir pitando de allí y otra, la que era la radical y a la que más hacía caso, inexplicadamente quería ayudarlo con cualquier cosa.

- ¿Está bien?

Después de dejar escapar aquella pregunta Fargan quiso tirarse desde el barranco por la estupidez de su pregunta. "¡Obvio que no está bien Fargan! ¿tas bobo o qué?" su mente le regaño. Sin embargo, el contrario solo le extendió la carta, ya algo arrugada.

La agarro con cuidado observando al dueño de la casa por si llegaba a arrepentirse, era un código contra las normas leer las cartas pero suponía que esta era un excepción. Con sorpresa Fargan pudo comprobar que solo existía una palabra en aquel papel blanco.

"Adiós"

Cuando dio una vista rápida al remitente, solo leyó un nombre "Staxx". Algo en su cabeza hizo clic al haber escuchado ese nombre anteriormente en la boca de su amigo Willy e inexplicablemente abrazo al chico que estaba al frente de él.

Oyó cómo el contrario se rompió y empezó a mojar su uniforme de trabajo pero eso no podía importarle menos.

─ཹ🌹 Fargexby Month Donde viven las historias. Descúbrelo ahora