Capitulo 3: cerca de la muerte

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Los no muertos caminaban de un lado a otro con pasos torpes, todos con la mirada perdida y las fauces abiertas en señal de un hambre insaciable, escudriñaban en busca de nuevas presas, se detuvieron al ser interrumpidos por una serie de sonidos, sus ojos parecían no ver con claridad pero Toby de igual manera sentía como era observado por esos ojos blancos y salvajes, los zombies se detuvieron por un momento para luego dirigirse con rapidez hacia el origen del ruido. Toby entró al parque y tomó la posición que Matthew le había asignado, luego los zombies comenzaron a entrar, eran seis grises, uno para cada niño excepto para Alicia que se mantenía al margen, el primero en atacar fue Matthew que derribó al primero con un golpe certero en la cabeza, Donnie empujó a uno, derribándolo y una vez en el suelo Tim se acercó y clavó los palos de escoba en los ojos del no muerto, éste dejó de moverse, otro zombie, un hombre delgado se acercó a Tim con rapidez, Donnie se colocó con su escudo en medio de ambos, el zombie se abalanzó con fuerza cayendo sobre los niños, ambos quedaron atrapados bajo el peso del zombie que intentaba morderlos, su mandíbula chasqueaba con cada intento y babeaba sin parar, un fuerte golpe impactó en el cráneo del zombie que giró y cayó al suelo como un saco de papas, liberando así a los niños, -están bien?- preguntó Francisco mientras observaba como los últimos zombies eran vencidos, anunciando a su vez como una nueva horda de "grises" entraban al parque.
Toby arrojaba piedras desde la cima de un tobogán, necesitaba tres o cuatro piedras para derribar a un zombie, Jake y Martha distraían a algunos grises para luego atarlos o cegarlos con bolsas. Tim y Donnie seguían con su plan de derribar y golpear, los zombies comenzaron a acumularse, eran demasiados, pero los niños seguían derribándolos, Donnie se mantenía cubriendo a Tim y a Francisco, hasta que en una transición -sin darse cuenta- fue rodeado por algunos zombies, el niño estaba muy asustado, no podía mover ni un músculo y sabia que estaba en peligro, Francisco gritó el nombre de Donnie para verificar que estaba bien pero no podía verlo, la gran cantidad de zombies impedían la visión, Francisco seguía golpeando con su bate de baseball a todo zombie que se le acercara pero eran demasiados, una mujer delgada, de cabellos sueltos y largos vestida con una bata de dormir derrumbó a Francisco quedando encima de él, el niño sujetó su bate en ambos extremos para así mantener la distancia entre la zombie y él, la mujer gris se volvía cada vez mas pesada, acercándose más y más, estaba a solo centímetros de morder el cuello de Francisco cuando fue derribada por el golpe de una rama que se rompió con el impacto, luego se escuchó un sonido fuerte seguido de varias repeticiones, era el sonido de un arma de fuego, un brazo levantó abruptamente a Francisco, quien se incorporó tembloroso, levantó la mirada y observó a unos adolescentes que derrotaban a los zombies rápidamente, era la primera vez que veía a esas personas, -de donde habrán salido?- Se preguntó el pequeño, los disparos de la pistola sonaban con fuerza mientras que los zombies caían de uno en uno con cada tiro, de un momento a otro ya no habían grises en el parque pero los que se encontraban en las calles comenzaban a moverse. -ustedes, vengan conmigo, rápido!- dijo uno de los adolescentes que salia del parque con rapidez, Francisco giró su mirada en dirección a donde se encontraba Donnie, el pequeño estaba tendido en el suelo del parque, con la mirada vacía y cubierto de sangre, sus heridas expulsaban a chorros el liquido rojo, su pequeño cuerpo lleno de mordidas anunciaba su fatídico final, Francisco se quedó pasmado al ver esa escena, el adolescente que lo había salvado hace unos momentos lo tomó por el brazo y lo llevó consigo, ambos salieron del parque, seguido por el resto de los niños y luego por los otros adolescentes, todos corrieron, atravesaron varias cuadras hasta llegar a una casa que se ubicaba al final de la calle.

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