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Kim Dahyun
Reino Solar; Un mundo donde sólo hay fuego, pero quién pensaría que habría vida allí, por supuesto nadie.
Sólo era un mundo sin importancia, un mundo donde sólo hay radiación solar capaz de destruirte en cuestión de segundos y si es posible en menos de lo que canta un gallo.
Nunca se podría vivir allí, lo cierto es que nadie creyó que allí vivía una pequeña chica rubia, que apenas era la primera habitante del sol; Kim Dahyun.
Ella desconocía sobre sus padres y sobre su nacimiento, sólo sabía que se sentía sola. Ella, una hermosa alfa, con cabellos rubios, ojos realmente muy hermosos, sin duda la sucesora única del sol.
En sus manos tenía sólo una gema de colores naranjas, que le había sido dado por un ser que ella desconocía. Llevándola consigo cómo collar.
Tenía tan sólo tres años cuando ese ser la envío a la tierra, entregada a los señores Kim, pareja que era sirvientes y servían a los reyes Zhou.
La esposa no podría tener hijos, por lo que Zeus se apiado de la soledad de la pequeña y envío al mundo terrenal; El planeta tierra.
[•••]
— Tzuyu ven pequeña, será mejor ir a desayunar— Gritó la madre de está.
Y así es,por otro lado estaba la tierra, una princesa pelinegra, piel morena, pero sobre todo con tres años de edad caminaba por el lugar. La pequeña sólo ve a su madre y corre a su padre, extiende sus bracitos para dar paso a qué su padre la siente en su regazo.
Aún no hablaba muy bien, pero era muy inteligente y astuta, sobre todo fuerte.
—Esto es hermoso cariño, me gusta cuando Tzuyu camina por el lugar y pasea por el mismo libremente— Dice el rey mirando a la pequeña niña, mientras deja de lado su desayuno, extiende sus brazos y la toma.
Su esposa sólo sonríe, su sonrisa se agranda más cuando su esposo le deja un dulce beso en la mejilla de su pequeña.
— Algo me dice que ella se llevará muy bien con Dahyun, la hija de nuestros fieles amigos— El rey asintió feliz— También se llevará bien con Elkie— Por alguna extraña razón el rey no se sintió feliz, no es que aquella omega fuera menos bella o algo así, sólo que su esposa era mejor amiga de la madre de la chica, ella soñaba con emparejar a su hija con la chica, el único detalle es que el rey sentía que la hechicera los había engañado, en partes. Para él era algo tonto, como es que una leyenda sin final iba a revivir nuevamente.
No tenía sentido que el caos llegará a la vida nuevamente.
Pero tampoco estaba feliz de que su esposa sea tan mejor amiga repentinamente de la madre de Elkie, ambas eran totalmente diferentes.
Agradecía que ella no fuera la predestinada de su hija. Aunque aún así había algo que lo inquietaba.
Tres años atrás
—Así es mi señor, supongo que cuando las estrellas caigan y esten a punto de perder su resplandor, los lobos se reunirán, estos serán que protegen el sol, también estarán a cargo de proteger la tierra. Sólo que el futuro de su hija es muy incierta, para ser verdad.
—¿A que se refiere con ello?— Su esposa sólo miraba a su bebé recién nacida, le daba alegría y miedo en partes iguales. En cambió el soldado que cuidaba de su esposa, seguía allí, pero aún estaba atónito a todo lo escuchado
— A que Zeus, el dios de los dioses y de los reyes mortales, hará que el caos y el bien se equilibre, usted sabe que el mal casi está reinando sobre nosotros y....
— Osea que..., te refieres que la pelea contra el caos y el bien regresará después de hace 1000 años, te refieres a que..
— Así es mi señor y ella a lado de su pareja predestinada se encontrarán, se amarán, pero tendrán muchos obstáculos, debido a que la fuerza oscura aparecerá después de que todas las chicas, omegas y alfas estén vivos en el mundo tanto terrenal, solar y lunar.— Explicó la bruja.
— Estás diciéndome que, la época en la que los omegas y alfas, ya sean de mismo sexo, volverá a la vida nuevamente.— Aún seguía anonado con la noticia.
— Mi señor, recuerde que así va la leyenda y ....
— Pero la leyenda y sus vidas, está como se escribe, inconclusa no es así.— La bruja estaba consciente de ello. Sólo le quedó asentir ante su rey, hasta que al fin habló.
— Lamentable así es, su vida es con un final incierto como el suyo y sólo eso, también quiero decirle que.....— No pudo seguir ya que el soldado líder entró a la habitación, haciendo que todos salten y que por inercia el soldado que cuidaba de su esposa la llevará a su alcoba.
— Su hija está maldita, ella hará que por su culpa, inocentes mueran— Gritó aquel soldado mientras empuñaba su espada, se suponía que nadie había escuchado la conversación.
El rey no tuvo otro remedio que llevar lejos a aquel soldado, tuvo que mandarlo a la horca, no dejaría que nadie difame a su hija,después de todo ella no tendría la culpa de revivir la leyenda
¿Cierto?
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