WHAT IF... El Mundo de la ciudad Riley

Todo terminó

En el frío de aquella habitación solo se escuchaba el llanto de una chica de cabello castaño y el sonido de la cadena de los grilletes que, cerrados en torno a sus muñecas, acompañaban con su tintineo aquel triste sonido, de pronto la puerta se abrió y una mujer con gesto severo entró y se sentó frente a ella.

-por favor... solo quiero saber si Maya está bien...

La mujer la observó, aquella chica no parecía la típica busca problemas que terminaría haciendo algo así, mas bien parecía alguien llena de dolor.

-Dime donde conseguiste el arma. Si colaboras tendrás mas oportunidades de mejorar la situación en que estas... Riley...

-me... la dieron...

-Quien?

-unas... unas chicas...

-ajá... y porqué la llevaste a la escuela y trataste de matar a tus compañeras?

La castaña cerró los puños mientras las lagrimas seguían cayendo por su rostro.

-solo a rita...

-Sin embargo

-SOLO A RITA!!!!! JAMÁS LE HARÍA DAÑO A MAYA!!! solo dígame que está bien...

-Dime los nombres de quienes te dieron el arma. – preguntó severamente la mujer.

-Nicole y Stephanie...

-Ajá... y dónde te la dieron?

-en un pequeño parque... cerca de... donde vivo... pero Maya... dígame

La puerta se abrió y un oficial entró acompañado de Topanga.

-Ya es suficiente. Soy la abogada de la señorita Matthews, nada de lo que haya dicho será valido ante juez al no haber sido en mi presencia y sin mi consejo detective.

La mujer se incorporó y salió de la habitación, Riley quiso ponerse en pie, pero la cadena y los grilletes se lo impidieron.

-mamá... Maya...

La castaña cerró los ojos recordando lo ocurrido tres horas antes...

-ESTAS LOCA!!! – gritó Rita cuando el disparó reventó la pared a su lado y la mampostería impactó en su cara

-Ya... estoy... harta... solo... solo tengo que centrar el blanco... y tirar... del gatillo...

En los pasillos todo era un caos, al escuchar el disparo el resto de chicos salió del salón, el escándalo llegó hasta el salón donde Cory estaba a mitad de su clase, sin pensar ni escuchar Maya se levantó de su mesa y salió rumbo al saló de castigo, en el camino un chico la empujó y se estrelló violentamente contra los casilleros cayendo de rodillas, iba a levantarse cuando el tropel de chicos provocó que uno de ellos le pisara el tobillo, con los ojos cerrados por el dolor se puso de pie y siguió su camino. En el salón de castigos un nuevo disparo reventó mas mampostería de la pared, el rostro de Rita era un manchón de sangre por los cortes que la mampostería le había hecho. Las manos de la castaña temblaban sosteniendo el arma.

-RILEY!!!!!

Lo que sucedió después fue una pesadilla para la castaña, el grito de su mejor amiga la hizo girarse al mismo tiempo que tiraba del gatillo, el arma se detonó y lo único que vio fue a Maya desplomarse en el piso, de lo que pasó después de aquello apenas recordaba imágenes difusas, paramédicos, policías tomándole los brazos y engrilletándola y después aquel cuarto frío y solitario.

-Maya va a estar bien, solo fue un rozón... Riley... tienes que decirme porqué hiciste todo esto...

-ya no podía más mamá... de verdad...

Entre sollozos Riley le contó a su madre el infierno que había vivido en la escuela todo aquel tiempo.

-...solo quiero irme a casa...

-Riley... temo que por ahora eso no será posible...

La castaña levantó el rostro con los ojos abiertos como platos.

-que...?

-Riley... tenías un arma... le disparaste a Rita y Maya... esto no es una falta de la escuela... es algo mas grave... te juro que haré todo lo posible...

-mamá... mamá quiero irme a casa...

La mujer abrazó a la adolescente que no dejaba de llorar. Una hora mas tarde la trasladaron a un centro de detención juvenil, en su celda Riley seguía llorando ahora vestida con el sobre todo blanco que las reclusas debían vestir, reaccionó cuando una mano la sacudió.

-Oye... van a servir la cena...

-no tengo hambre...

-Anda ven, levántate.

La castaña vio a la chica que tenía frente a ella, era un poco mas alta que ella, de cabello corto negro.

-Soy Babe, Babe Carano.

-Que no eres...

-si... Game Shakers...

-Pero

-Es una larga historia... anda ven... tienes que comer.

En silencio Riley siguió a la otra adolescente al comedor, solas en una mesa la castaña apenas si tocó la comida.

-Oye, no todos los días se come tan bien aquí, anda no lo desperdicies.

-quiero irme a casa...

-como todas aquí...

Una semana después Riley se presentó en la corte, allí escuchó en silencio la presentación de los fiscales y como mostraron el arma que había usado, así como las acusaciones por haberle disparado a Rita y a Maya, además escuchó algo que la dejó perpleja, el arma tenía las miras desalineadas y por ello los dos disparos a Rita habían fallado y el que impactó a Maya solo le había rozado el brazo.

-...en conclusión la señorita Matthews tenía conocimiento de cómo usar armas, pero la falla antes expuesta impidió que sus acciones tuvieran consecuencias trágicas.

Luego Topanga dio sus argumentos y mostró como Riley había sido victima de bullying hasta llegar a aquellas consecuencias. Luego de analizar todo aquello la jueza se retiró a su oficina.

-Mamá... que pasará ahora? – preguntó la castaña

-No quiero ilusionarte... podrían darte una sentencia... y quedarte en la correccional por algún tiempo

Riley bajó la cabeza y sintió las lagrimas corriendo por sus mejillas.

-mamá tengo miedo...

Luego de dos horas que parecieron años la juez volvió al estrado y observó en silencio a la adolescente.

-Todos de pie por favor. Luego de analizar las pruebas presentadas por la fiscalía, las presentadas por la defensa y los antecedentes de la señorita Riley Marguerite Matthews, así como el hecho de que lo acontecido no tuvo consecuencias trágicas, he decidido condenarla a tres años de libertad condicional, tendrá que tomar terapia psicológica y revisaremos su caso en seis meses.

La castaña estaba petrificada, reaccionó cuando Maya corrió a abrazarla al mismo tiempo que sus padres.

TRES MESES DESPUES.

Aunque todos seguían viéndola raro, las cosas finalmente comenzaron a cambiar para Riley, Rita no volvió nunca a la secundaria Abigail Adams y ella continuó con la terapia que le habían mandado lo cual la ayudó a desahogar su dolor y a sentirse mejor poco a poco.

-Maya...

-Dime hermosa.

-Ya no más Rileytown.

-Que?

-Si algo me pasa... tu serás la primera en saberlo. Y mamá también, ya no voy a esconderme en Rileytown nunca más.

Maya sonrío y abrazó a su mejor amiga. Al fin la pesadilla finalmente iba terminando y las cosas comenzaban a lucir mejor, aunque quedaba camino por recorrer, ella estaría allí para su mejor amiga. Siempre.

FIN.