CAPÍTULO IV: Discusión

36 3 3
                                    

- Bueno, me voy ya, tengo que recoger a mi hermano del gimnasio. - Dice Ámber.
- Vale, yo me voy a ir también, a ver si mi madre ha vuelto ya de Londres. - Contesto.
- Vale, cuando llegue avísame porfa. - Asiento con la cabeza y ambas salimos de la cafetería, nos vamos cada una en una dirección. Voy de camino a mi casa y le mando un mensaje a mi madre preguntándole que cuando va a venir. Llevo varios días sin saber nada de ella, pero no me parece algo raro ya que cuando se va de viaje por trabajo, esta muy liada. Levanto la vista de mi móvil para guardarlo y veo a Castiel al final de la calle fumandose un cigarro. Me disponía a cruzar a la otra acera ya que no tengo ganas de verlo, aunque nunca las tengo; pero me ve y empieza a acercarse a mi, y como sé que es inútil acelerar el paso ya que me va a alcanzar, me quedo quieta esperando a que venga:
- Vaya, no has salido corriendo, es un gran avance. - Dice Castiel riendo.
- Aún estoy a tiempo de hacerlo, Castiel.
- Ya, pero sabes que no lo vas a hacer. - Dice mientras expulsa el humo.
- ¿Y eso por qué?
- Porque te conozco a la perfección. - Dice acercándose un poco más a mi, doy un paso hacia atrás.
- Me conocías, no te equivoques. - Le corrijo.
- Ya... lo que tú digas... Bueno, cambiemos de tema; ¿a dónde vas?
- Me voy a mi casa.
- Genial, te acompaño y lo que surja. - Dice mirándome con una sonrisa pícara.
- Ni en tus mejores sueños. - Empiezo a caminar rumbo a mi casa, Castiel sale corriendo detrás de mi para alcanzarme y caminar a mi lado.
- No sirve de nada que huyas, voy a alcanzarte de una manera u otra. - Dice susurrando sobre mi oído. Yo resoplo y sigo caminando con Castiel a mi lado, de vez en cuando lo miraba, su sonrisa no se desvanecía. Finalmente llegamos a mi casa, saco las llaves del bolsillo de mi chaqueta y meto la llave en la cerradura:
- Gracias por acompañarme, aunque podría haber venido sola.
- Lo sé, pero soy un caballero y he de acompañarte. - Contesta Castiel sonriendo. Giro la llave y abro la puerta de casa.
- Adiós. - Digo.
- ¿No me vas a invitar a entrar? - Dice enarcando una ceja.
- No, nunca más volverás a entrar, así que deja de intentarlo.
- Muy bien, pues hasta pronto. - Entro a casa y veo a Castiel a través de la ventana irse. Voy a mi habitación para dejar mis cosas y después me voy a darme una ducha.

Salgo de la ducha, recojo mi habitación y me voy al salón a ver la televisión. Por fin, me llega un mensaje, es de mi madre: Cariño, tengo mucho trabajo, así que volveré en unos días o semanas más.
¿Cariño? Nunca me llama así... Contesto rápidamente diciéndole que no pasa nada y que se tome el tiempo que necesite. Seguido de eso, le envío un mensaje a Ámber diciéndole lo que mi madre me ha dicho. Después sigo viendo la televisión durante un rato, ceno y me voy a mi habitación. Estaba mirando Instagram cuando escucho varios golpes secos sobre el cristal de la ventana de mi habitación. Me levanto de un sobresalto y voy a mirar que ha pasado. Abro la ventana y ahí estaba el pelirrojo:
- ¿Que coño haces aquí? - Pregunto en tono serio.
- Se dice buenas noches. - Dice con una sonrisa ladina.
- ¿Que qué haces aquí, Castiel?
- Hacerte una visita. - Sonríe. - ¿Me dejas entrar? - Lo miro con algo de desconfianza, pero acepto.
- Solo porque estoy sola en mi casa, pero no te acostumbres a esto.
- Esta bien. - Sonrie y entra a mi habitación.
- Asi que estas sola... - Dice mirándome con una sonrisa pícara.
- Sí, mi madre está de viaje por el trabajo.
- ¿A dónde se ha ido esta vez?
- A Londres... - Castiel me mira con cara de preocupación.
- ¿A... Londres? - Asiento con la cabeza.
- No preguntes nada más, sé por donde vas a salir y no quiero hablar del tema y preocuparme por nada...
- Pero... Danna... A tu madre le pueden pasar miles de cosas... y no buenas. - Castiel sabe todo lo que pasó con mi padre ya que fue en la época en la que estábamos juntos, yo le contaba absolutamente todo lo que me pasaba; aunque ahí era cuando nuestra relación se estaba empezando a torcer.
- Castiel, de verdad, deja el tema por favor te lo pido... - Digo con tono de preocupación mientras retengo las lágrimas. Castiel me mira y se acerca a mi, me abraza. Yo correspondo a este sin pensarlo dos veces. Nos quedamos un rato así y poco después nos separamos.
- Espero que todo vaya bien... - Digo
- Yo también lo espero... no quiero volver a verte sufrir, Danna... - Añade Castiel con una sonrisa reconfortante. - ¿Has hablado con ella o algo?
- Sí... Hoy iba a volver pero me ha dicho que tiene mucho trabajo y que volverá varios días o semanas más tarde...
- ¿Podrias mantenerme informado? - Vuelvo a la realidad, me doy cuenta de que acabo de entregarme un poco más a Castiel, cosa que no me gusta demasiado. Así que me aparto un poco más.
- ¿Por qué debería hacerlo? - Digo, cambiando ligeramente el tono de voz.
- Porque... Porque me preocupo por ti, Danna. - Dice Castiel en tono serio.
- Ya... Te preocupas por mi, al igual que te preocupaste hace varios años, cuando mi padre me maltraba, cuando me dio depresión a causa de todo lo que hiciste... Pero claro, tú te preocupabas y te sigues preocupando por mi, ¿verdad? - Digo enfadada mientras las lágrimas salen de mis ojos.
- Danna... Yo...
- Tú, ¿qué? ¿Eh? ¿Vas a venir ahora, después de tanto tiempo a disculparte o como va la cosa? Ahora entiendo el porqué del que ahora hables tanto conmigo, de que me acompañes a casa... Lo haces para compensar, ¿no?
- ¡NO! No lo hago para compensar, lo hago porque, como ya te he dicho, me preocupo por ti, y siempre me preocupé por ti, ¡SIEMPRE!
- Eso es mentira, Castiel.
- ¿Tu crees que lo es? Si no me hubiera preocupado nunca por ti, ¿quién te hubiera acompañado a abortar cuando tu propio padre te dejó embarazada, Danna? - Las lágrimas vuelven a tomar acto de presencia en cuanto Castiel me recuerda ese hecho.
- Vete de mi casa, YA.
- Me dices esto porque te has quedado sin argumentos.
- He dicho que te vayas de mi casa. - Castiel suspira y sale de mi casa. Yo me meto en mi cama y continuó llorando recordando lo último que Castiel ha mencionado hasta que termino durmiendome.

Someone I loved [CASTIEL CDM]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora