Parte final.

804 98 31
                                    

Me di cuenta que hay muchas cosas que no necesito de ti, Eunwoo.

Me di cuenta que hay muchas cosas que no necesito de ti, Eunwoo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— Tenemos que hablar. —me senté en el banco que había en uno de los patios del campus.

El día estaba soleado, la brisa movía un poco las hojas de los árboles y habían pocas personas fuera por ser periodo de clase. Nosotros nos habíamos salvado, el profesor de historia no había ido y por eso mismo librábamos una hora.

Hora que no podía desperdiciar y en la cual iba a dejar las cosas claras. Lástima que iba a ser un día tan hermoso para un hecho tan triste.

— ¿Pasa algo malo? —preguntó preocupado tomando asiento frente a mi, tomó mis manos y me miró directo a los ojos— Tu rostro serio me da mala espina.

Hacer esto dolía como el infierno y ardía en el pecho de una manera que casi me quitaba el aire, no podía decir que no era así cuándo la verdad era que me costaba un montón soltar las palabras que días antes había pensado mucho.

A pesar que la situación se veía relajada, estaba tensa.

— Yo... Posiblemente sí lo tomes a mal. —aclaré mi garganta soltándome de sus manos con delicadeza— Esto ya no funciona, Eunwoo.

Me miró por unos minutos antes de fruncir el ceño e inclinar un poco su cabeza.

— ¿A qué te estás refiriendo? —preguntó dudoso, acomodándose mejor— No entiendo.

— Me estoy refiriendo a esto Eun, a nosotros. Ya lo que tenemos no funciona y por más que me cueste decir esto... —solté un suspiro tembloroso— Debemos dejar las cosas hasta aquí.

Le vi tragar fuerte al terminar de decir aquello, pasando sus manos por su cabello de manera rápida para segundos después mirarme con los ojos llenos de pánico y sorpresa. No sé lo esperaba, lo podía notar, seguramente pensaba que las cosas estaban bien entre ambos.

Pero no era así, nada estaba bien entre nosotros.

— Vamos, Miso. Las cosas no tienen porque ser así, puedo mejorar para ti. —me miró suplicante— Puedo ser alguien mejor, pero por favor no vayamos a dejar las cosas aquí, me costó tanto tenerte a mi lado como para dejarte ir de la manera más fácil.

Le miré como si le hubiesen crecido tres cabezas, él me había dejado ir hace mucho tiempo, solo que no se había dado cuenta de ello.

— ¿Pretendes qué siga contigo cuándo me has destrozado emocionalmente? —solté una risa irónica— Es mejor que dejes de mentirte a ti mismo, Eunwoo, y comiences a ver las cosas verdaderamente son. Tú nunca vas a ser alguien diferente porque estás estancado en el pasado, vives ahí y no quieres salir.

— Tú también cometes muchos errores. —recalcó como todas las veces, siempre buscaba igualarnos. Ponernos en el mismo sitio como si ambos fuésemos lo suficientemente malos— Yo no tengo totalmente la culpa aquí.

Mi idea de terminar pacíficamente con él se estaba yendo directo al caño.

— ¡Yo no fui quién se besó con alguien más a mis espaldas! Yo fui quién desconfío desde hace seis meses, yo no fui quién no se interesó por mí. —exploté arrojándole en cara todo aquello— Yo jamás hice algo para perturbar tu maldita paz y sé que a veces no suelo ser muy cariñosa ¡Pero estaba tratando de mejorarlo para ti, cuando tú solo te dedicabas a hacerme sentir como una mierda!

Me levanté del banco tomando mis cosas y colgando el bolso de mi hombro con una fuerza que desconocía en mi.

Estaba cansada de esto, estaba cansada de él.

— Traté todo lo posible de ser alguien mejor para ti y de tener esperanzas que ibas a dejar de ser un completo imbécil conmigo. Te juro que lo traté, pero ya no aguanto que me quieras controlar, mucho menos que te pongas celoso hasta de una jodida hormiga. —solté otro suspiro alborotando el flequillo en mi frente, tenía que calmarme— Ya esto dejó de funcionar hace seis meses atrás cuando cambiaste, porque lo hiciste y no fue para bien. Cambiaste de manera tan brusca que ni siquiera te importaron los sentimientos de los demás.

— Miso... —suplicó con los ojos llorosos, a pesar de su actitud dura antes, sabía que le dolía todo lo que pasaba— Dame una última oportunidad, una para ser mejor y enmendar mis errores.

Lo miré, tan vulnerable con sus ojos llenos de lágrimas y las manos temblando mientras alborotaba su cabello en un intento desesperado de arreglar las cosas.

Se veía tan distinto a cuando reclamaba por cosas tontas.

Pero ya no había nada que arreglar, ya lo hecho estaba hecho y él tenía que lidiar con todo los errores que había cometido, tenía que saber que la había jodido lo suficiente como para no poder regresar y arreglarlo. Porque ya nada era como antes, en seis meses las cosas se retorcieron tanto que ya no podían enderezarse y la situación había ido tan en decadencia que era imposible hacer algo al respecto.

Habíamos caído en un pozo en el que ya no nos sentíamos bien, en el cual ya era más dependencia del otro que él mismo amor. Habíamos caído bajo y estábamos enterrados hasta el cuello de lodo, ya no había manera de salir.

Ya había llegado a mi límite, ya había soportado lo suficiente. Ya había sufrido por alguien que en realidad no me valoraba y ya había dado hasta mi último suspiro tratando de arreglar algo en lo cual Eunwoo ni siquiera quería estar.

Porque no ponía de su parte para hacer surgir las cosas, siempre era yo quien me encontraba tirando de la cuerda y desgraciadamente también lo necesitaba a él para hacer funcionar todo.

Yo no podía cargar sola con el peso de una relación desastrosa.

— Ya no puedo, Eunwoo. —negué.

— ¿Ya no me amas cómo antes?

— La cuestión no está en que te ame o no. La situación es qué, indiferentemente de amarte o no, ya no puedo soportarte cada vez que quieras pelear por algo tonto, mucho menos puedo estar aquí cuándo yo te tengo confianza y tú no la tienes conmigo. —expliqué mordiendo mi labio inferior, tenía ganas de llorar, pero no iba a hacerlo— No puedo estar con alguien quién busca a otra persona cuándo ya tiene a quien se supone es su novia, no me merezco esto.

Y dolía como los mil demonios verlo ahí luciendo tan hermoso, pero sin intensiones de luchar.

— Así que dejemos las cosas hasta aquí. Gracias por todos los hermosos momentos que me hiciste pasar en diez meses, Eunwoo. —sonreí un poco— Espero puedas ver las cosas con más claridad y pienses antes de actuar para que la próxima chica no sufra tanto como yo. Ten una buena vida.

Y dolía porque le amaba aún como si fuese el primer día.

Pero yo me amaba más de lo que lo hacía con él y por ese mismo amor que me tenía a mi misma había decidido dejar las cosas.

Porque todo esto no me hacía bien.

Y me preferí a mi antes que a él.

FIN.

🎉 Has terminado de leer 𝐎𝐅 𝐓𝐇𝐄 𝐓𝐇𝐈𝐍𝐆𝐒 𝐈 𝐃𝐎𝐍'𝐓 𝐍𝐄𝐄𝐃. ━ Eunwoo ✓ 🎉
𝐎𝐅 𝐓𝐇𝐄 𝐓𝐇𝐈𝐍𝐆𝐒 𝐈 𝐃𝐎𝐍'𝐓 𝐍𝐄𝐄𝐃. ━ Eunwoo ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora