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Taylor miró su reloj, esperando ansiosamente el momento en que entrarás por la puerta. Te habías ido hace una semana. Tenías que hacer una pequeña gira para promocionar tu nuevo single, y Taylor no podía esperar para tenerte de vuelta en sus brazos.
Mientras te esperaba, Taylor se desplazó por YouTube, revisando algunas de sus canales favoritos de YouTube, cuando se encuentra con una broma reciente, más específicamente una broma de engaño.
Sonriendo, decidió hacerte la misma broma. Esto sería una represalia por ignorar una de sus reglas de larga distancia anoche de no llamarla antes de acostarse. Los niños se habían ido, y esto le dio la oportunidad perfecta.
Taylor mira su reloj y descubre que ya casi es hora de que vuelvas a casa. Ella salta del sofá de la sala de estar y corre escaleras arriba agarrando una de las cámaras.
"¿Qué pasa S/SN? No puedo tardar mucho con esta introducción porque T/n está casi en casa". Dijo mirando tu ubicación. "Pero estoy a punto de obtener T/n con otra broma de engaños. Estén atentos". Ella termina el video y esconde la cámara en la parte superior de la pantalla plana que estaba colocada en la pared de su habitación.
Luego va a cambiarse uno de sus trajes de lencería y se peina, tratando de parecer desaliñada.
Al oír que la puerta de un automóvil se cierra desde el camino de entrada, se asoma por la ventana y te ve.
"¡Aquí viene ella!" Ella chilla ansiosamente antes de saltar a la cama y estropearla. Coloca algunas almohadas debajo de ella, arrastrándose sobre ellas antes de comenzar a gemir en voz alta.
Entras cansadamente a la casa y arrojas tu equipaje a un lado. Inmediatamente te quitas los zapatos y vagas por tu casa.
"¡Bebé, estoy en casa!" Grita, con exceso de trabajo.
Miras a tu alrededor sin ver a Taylor en ninguna parte de abajo, así que viajas arriba.
Llegas al segundo piso y tu cara se contrae de confusión cuando escuchas los gemidos familiares de Taylor.
"¡Oh, bebé! ¡Así es, lo haces realmente bien!" Taylor gime en voz alta, intentando con todas sus fuerzas no reír.
Caminas silenciosamente hacia tu habitación, tu estómago se retuerce cuanto más te acercas a tu habitación.
"Oh, mierda, eres tan grande ... ¡Zach!" Taylor podía sentir que te estabas acercando, por lo que comienza a empujar la almohada debajo de ella.
Empujas la puerta de tu habitación y la vista ante ti te enfurece. Taylor continúa montando la almohada, fingiendo gemir el nombre de Zach.
El golpe de la puerta contra la pared hace que Taylor se dé vuelta y te mire con una expresión de pánico falso.
"No lo hagas bebe. ¡No es lo que piensas!" Ella grita, justo cuando te lanzas en su dirección.
"¡A la mierda!" La empujaste, lanzando puñetazos mientras te preparabas para golpear al tipo Zach.
En lugar de que tu puño choque con una cara dura, tu puño entra en contacto con una almohada suave y esponjosa, por lo que quitas las sábanas al darte cuenta de que te ha hecho una broma.
"¡Tengo tu trasero!" Taylor se pone de pie, saltando sobre tu cama mientras se ríe y te señala. Sacudes la cabeza, sonriéndote a ti mismo. Tenías que admitir que ella te tenía cuando menos esperabas algo como esto. "Entonces, ¿este es el saludo de bienvenida a casa que recibo? ¿Pensé que me extrañaste? Cruzaste los brazos, mirándola."
"Te extrañé." Taylor se sumerge en tus brazos, envolviendo sus piernas alrededor de tu cintura. "Simplemente quería obtener tu culo. Eso fue por desobedecer nuestras reglas cuando salimos fuera de la ciudad ayer. No me llamaste anoche antes de dormir."
"Volví del programa demasiado tarde y pensé que ya estarías dormida cuando lo hice, así que no quería molestarte ".
"Sí, lo que sea. Sin excusas, ya has sido castigada por eso."
"Eres una malvada. Realmente me tenías a punto de golpearle el trasero a alguien ".
"¿Le pegarías a alguien por mí? Eso es tan dulce ". Taylor te besó en toda la cara.
" No, iba a patearle el trasero a alguien por tu culpa, no por ti. Sabes que no juego esa mierda de ser infiel." Corriges, tirándola a tu cama antes de dejarte caer a su lado. "Estoy exhausta. "
"Awww, mi bebé está cansada." Taylor salta, y va a recuperar la cámara desde la parte superior del televisor.
Cierra el video antes de volver a reunirse contigo en la cama, sentándose a horcajadas sobre tu regazo.
"Te extrañé". La empujas hacia abajo, abrazándola.
"Yo también te extrañe, bebé. "Ella planta un dulce beso en tu labios.
"¿Por qué no vas a refrescarte mientras yo corro a buscar tu comida favorita en el restaurante de la calle? "
"¿En serio? ¿Harás eso por mí? "
"Sí, lo haría. Ya lo pedí y les dije que me lo prepararan a las seis, que es en 7 minutos. "Iré a buscar nuestra comida y podremos comer mientras me cuentas todo sobre tu viaje. Luego podemos relajarnos y disfrutar nuestra noche sin niños ". Se levanto de tu regazo, agarrando tu sudadera con capucha.
"Bueno." Suspiraste, dirigiéndote a la ducha.
Sí, Taylor era molesta a veces, principalmente cuando se trataba de sus bromas, pero la amabas y no la cambiarías por nada en el mundo. Ella te cuida muy bien.
