HABITACIÓN 309

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El sonido de unos pitidos constantes, hizo que Vegetta se despertara, estaba en una camilla de hospital. Se alertó al no encontrar a Rubius a su lado, por lo que se intentó levantar, pero tenía muchos cables enredados en él, decidió llamarle para ver donde estaba, y escuchó un teléfono sonar en la habitación pegada a la suya.

-¿VEGETTA?.

Rubius estaba en la habitación de al lado.

-Rubius, ¿estabas despierto?.

-Sí, llevo consciente desde que llegamos, me han hecho muchas pruebas y curas, pero no consigo conciliar el sueño, ¿tú qué tal?.

-Muy bien, la verdad, no me duele nada, no tenía ni heridas ni nada, no sé qué es lo que ha pasado, es decir, me acuerdo de todo pero no sé porque me mareé ni nada.

-Cuando salgamos de aquí tenemos que hablar y te cuento todo, han sido muchas emociones, llevamos aquí 3 días y...

-¿TRES DÍAS? Y he estado durmiendo todo el tiempo?.

-Sí, te he llamado varias veces, y me he preocupado muchas más, pero como todos los médicos me decían que estabas bien me tranquilizaba un poquito.

-Y ¿Cuándo nos piensan dar de alta?.

-Lo más probable es que a ti te lo den hoy o mañana y a mí en 2 días o por ahí, sigo con heridas abiertas.

-Bueno, al menos podremos hablar por aquí.

-Sí.

-¿Te ha atendido muchos médicos?

-No, 2 médicos, algunos enfermeros y Auron, no sabes la ilusión que me ha hecho, ha venido para darme una consulta de psicólogo para preguntarme que tal estaba, pero valla, que hemos acabado hablando sobre todo menos de eso, jajaja.

-Que, bien, da gusto que te visiten los amigos.

-Si, Akira vino a verte pero como estabas dormido no estuvo mucho tiempo.

-Lógico- como quería a Akira, era mi mejor amiga desde el colegio, siempre nos hemos apoyado en todo- oye... y no me puedes ir haciendo un adelanto o algo de lo que pasó?, estoy muy confuso.

-La línea no es segura, es mejor hablar en privado, muy privado.

-Joder...

-Uy ¿nuestro Vegettita anti palabrotas ha dicho una?- Rubius rió divertido, no era muy común que el moreno dijera palabrotas.

-Cállate jajaja.

Ambos reían felices, estuvieron hablando casi una hora, colgaron por la visita del médico de Rubius, era la hora de sus curas.

Mientras tanto, Vegetta seguía pensando en lo sucedido, recordando y deduciendo que pudo a ver pasado.

-Tampoco puede ser tan difícil, cuando llegamos Rubius se mareó al principio de la casa, luego yo en ese mismo punto también lo hice... puede ser debido a algunas plantas, o radiación, algo de eso sería, sí, vale, después al entrar nos dividimos la casa, yo subí arriba, en ningún momento escuché pasos o ruidos de Rubius, tampoco se rompió nada, de cualquier manera inmovilizaron y callaron a Rubius y se lo llevaron al sótano, como no hubo ruido de puertas, quiere decir que ya había alguien en casa, o estaban de ocupas, o esperaban a alguien... cuando llegué al sótano, la puerta ya estaba abierta... y ya a partir de ahí a saber lo que pasó, a ver si salimos de una vez de este estúpido hosp...

-¿Samuel de Luque Batuecas?.

Una enfermera paso a la habitación junto a 2 médicos, un chico y una chica que se le hacía bastante familiar.

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⏰ Última actualización: Jul 31, 2020 ⏰

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