Punto; Y Coma.

"Me encontré, ¿hoy?"

He estado buscando por mucho tiempo.

¿Será que algún día los volveré a ver?

O será que mi mente se niega a pensar que quizás ya estén muertos...

Ese fatídico día que pensé sería de los mejores de mi vida, otro de los mejores, terminó siendo todo lo contrario.

Mis tíos: el oficial de policía Hades y su esposa embarazada Grace, se han encargado de cuidar de mi hermana y de mí desde el incidente.

Estoy mentalmente harto de todo lo que me ha sucedido hasta hoy.

He llegado al punto de no saber que hacer con mi vida.

Mis padres me llamaron Robert Matthew Angel, y a mi hermana: Emery.
Ella es una chica inteligente aunque muy antisocial; se podría decir que sus mejores amigos son los libros.
Yo en cambio, soy de las personas más populares de mi instituto. Tengo muchos amigos, y en la mayoría sé que puedo confiar.

Soy alguien con condición física muy buena y me considero alguien atractivo puesto que mis músculos resaltan por estar bien definidos, mi cabello color azabache, mi rostro como el de un supermodelo según dice Susan Holmes: mi novia.

Muchas personas me decían que nuestra relación no alcanzaría ni una semana... pero luego fueron dos, tres, cuatro extendiéndose a meses, y finalmente el año.

Curiosamente, ella me comprende.
Al iniciar nuestra relación todo parecía inestable... pero se podría decir que ella es la razón de mi existencia ahora.
No solía sentirme yo mismo más que con mi hermana, hasta que llegó ella a mi vida.

Hubieron momentos extraños e inesperados durante mi noviazgo con Susan... mi mejor amiga Cassidy me confesó lo que sentía por mí. Ya no podía verla como una hermana como lo hacía.
Después de un tiempo me afirmó que ése sentimiento ya había desaparecido, pero aún sigue siendo un poco incómodo.

Tengo un mejor amigo, claro, su nombre es Chris McQueen. Somos amigos desde el preescolar y de verdad aprecio su apoyo y compañía a todo momento. No es el amigo perfecto, pues claro que tiene defectos, pero no suelo fijarme en eso. Se que tiene un buen corazón y con eso me basta.

Chris ha sido quien se dedicó a buscar a mis padres con el mejor equipo de policías.

Aún espero los resultados.

-

Ya había oscurecido, por lo que me tocaba a mí asear y cerrar la heladería "Creamsweet" donde trabajaba toda la semana.

-¡Cuídate, Robert!, ¡hasta mañana!. - gritó mi compañera Nora mientras salía por la entrada.

Le hice un gesto con la mano despidiéndome.

Tomé mi móvil en busca de algún mensaje o llamada perdida de Susan. Nada. No había ninguna, y eso me preocupó.
Decidí llamarle para confirmar que su estado de ánimo era positivo y no lo contrario.

Contestó al segundo tono.

-¿Robert? - preguntó en un susurro, parecía que estaba a punto de dormir.

-¿Estás bien?.

Suspiró y pareció que se lo pensaba.

-Estaba por dormirme, ¿qué es?, ¿para que me llamas?

-¿Sigues enfadada por lo de hoy?.