Piropos ✦ Wosani࿔*:･ﾟ

twenty one

Vᴀʟᴇɴᴛɪ́ɴ Oʟɪᴠᴀ.

— Eu boludo, ¿no te cansas?

— ¿De ver tu cara?, obvio — reí —. ¿De qué exactamente?

— De mandarle notitas a Dani, ya no sé cuántas le vas mandando y ninguna te ha respondido.

— ¿Y cómo querés que me responda si no firmo con mi nombre? Duh. Pelotudo — dije lo último en un susurro.

— Ah pero si vos sos un idiota terrible, eh — espetó burlándose —. ¿Y cómo querés que te responda si ni siquiera firmas gil?

— No busco que me responda Manuel — aclaré —, sólo quiero que sepa que alguien le da al pibe, porque está más bueno que comer pollo con las manos.

— Vos nunca vas a cambiar — dijo negando con la cabeza divertido.

— Déjame ser feliz y andate con Mateo que desde acá siento su mirada en mi nuca, y si las miradas mataran yo ya estaría a cien metros bajo suelo.

— Tarado. Bueno me voy, me avisas cualquier cosa.

— Dale — dije y me concentre en resolver los estúpidos problemas de matemáticas que por alguna razón nunca los entiendo.

...

— No me ha dicho nada sobre eso — me respondió Mateo.

Estábamos hablando y surgió el tema de los piropos que le mandó a Dani; Manuel y Mateo están enterados por completo del tema y eso. Mateo me dijo que Dani no le ha mencionado nada, ya que son mejores amigos igual que Manu y yo.

— Bueno — respondí —. ¿Y si le sacas información Teito?, porfa — puchereé.

— Dale pero no te prometo nada, él es muy reservado con sus sentimientos.

— ¡Gracias Teooo! Te amo — lo zarandeé de la remera.

— Eu, soltá a mi bebé — habló Manu separándome de Mateo.

— Celos modo on — dije acompañado de la risa de Mateo.

— Pelotudo modo on — contraatacó.

— Ya ya, mejor paren — intervino Teo.

— Está bien — dije al unísono con Manu.

Mateo es como una especie de cable a tierra para nosotros en este tipo de situaciones en las que solemos bardearnos por estupideces, además de ser una increíble persona claro.

— Voy a aprovechar que recién empieza el recreo para ir a hablar con Dani, nos vemos.

— Te amo — gesticulé cada palabra para que Manu no oyera pero creo que sabe leer labios porque recibí tremendo zape en la nuca, el hijo de puta tiene fuerza —. Ya ya perdón, tampoco te lo pienso quitar eh — sobé la parte de atrás de mi cabeza, pues sí dolió.

— Más te vale — se acercó y me abrazó.

Este es re bipolar, bueno así lo quiero al pelado.