Zayn nunca antes había conocido el arrepentimiento. Jamás se había sentido tan vulnerable y aplastado.
Todo lo que hacía, le recordaba a Niall. Absolutamente todo.
Cuando quería desquitarse y pintar en su cuarto de graffiti, terminaba llorando en el piso porque Niall estaba plasmado en toda su pared.
Incluso cuando lavaba los trastes, o cuando veía a su hermanita menor jugando y ella le preguntaba que cuando iba a llegar Niall para salvarla del enorme dragón...
Lo peor de todo, era que no sabía nada de Niall, y quería intentar ir a todas las universidades de California para encontrarlo, pero había demasiadas, y a pesar de todo el dinero que tenía, no podía contratar a alguien para que investigara el nuevo número de teléfono de Niall, si es que siquiera tenía uno nuevo...
En fin, Zayn estaba muy arrepentido, demasiado, a decir verdad. Y había decidido alejarse un poco de todo, incluso de Harry, porque le dolía estar con él.
Entonces ahora era el y su soledad. Y tenía que hacer algo para dejar de sentirse tan arrepentido...
