I.
Mía mor, solo quiero alimentarte
de fuegos artificiales,
que entiendas todos los
colores que llevas por dentro,
que tu alma es intrínseca,
totalitaria.
Una rapsodia inigualable,
con la que cualquier escritor
delira acerca,
desplegándose bajo el paraje
oscuro de mis experiencias.
II.
Mía mor,
Vístete de huracán.
Reclama tu esencia y sexualidad,
al rojo vivo del atardecer.
Sé que te han llamado indigna.
Indigna de elogios, de admiración.
Sé que creen que eres un accesorio,
en un currículum para causar
envidia a desconocidos.
Pero, tan siquiera el concebir tal idea,
debería romperte el alma,
debería rompernos el alma a todos.
Así, que álzate.
Reclámate como soberana.
Soberana de sus pensamientos.
Soberana de mis deseos.
Soberana de los cantares del alma de todos estos muertos.
Mía mor, soberana de este mundo
siniestro, que necesita ser arrebatado
por tu presencia.
III.
Mía mor, quiero comer beso en desayuno,
derretirme bajo sol.
Las vacaciones interminables de tu sonrisa,
hacia un mundo sin retorno en tus pupilas.
Oigo a mis amistades hablar de lugares paradisiacos
¿China? ¿India? No.
Mía mor, ésa es mi destinación.
Quién sabe,
tengo esta sed incurable,
de hacer todo real en esta vida.
Más que vasos rojos y bebida.
Sí, quién sabe
sentir brisa y risa.
Alegría pura,
absorta en vivencias,
más que el alucinógeno
de la esquina.
Alegría pura,
en la punta de tus labios,
Mía mor;
Poema por: Leticia Martínez/Belladonnah
Recomendación para la lectura: Escuchar. Runaway de Del Shannon o Get Free de Lana Del Rey
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Las Horas Celestes
PoesíaDéjate atrapar por la poesía del alma, reflejada en las agonías de la interminable era adolescente, la búsqueda del yo, el amor brutal y las ansias de experiencias, plasmadas en "Historial para el Sofá" He crecido en un mundo el cual no puedo compr...
