Descifrando el Mensaje Parte II

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A las seis de la mañana suena mi despertador, levanto mi mano y lo apago. Me levanto de la cama y tomo mi toalla que se encuentra encima de la silla de mi escritorio. Al salir de la habitación e intentar entrar al baño se me hace extraño no escuchar la voz de mi madre levantándome a mí y Angelín. Antes de entrar al baño, decido ir al cuarto de mi madre y la veo aun dormida; salgo de su habitación y cierro la puerta silenciosamente, para no despertarla.

En ese momento Angelín viene saliendo de su cuarto y me ve; y me dice — Son ideas mías o en la mañana de hoy no escuche a tu mamá llamándonos —. — No te equivocas, ella aún sigue dormida —.

— Una de nosotras, tiene que hacer el desayuno. Me dice Angelín.

— Lo haré yo, mientras tú te estas bañando.

— Ok, Luna. Me dice Angelín y entrar al baño.

Después de hablar con Angelín regreso a mi habitación y dejó la toalla sobre en la cama. Tomó la bata de mi pijama y me la colocó; bajo las escaleras y al entrar a la cocina me llevo la sorpresa de que mi hermano había preparado el desayuno, y que además Miguel se encontraba allí. Él al verme me dice — Buenos días Luna —.

- Buenos días. Les digo a los dos.

- Si aún traes puesta la pijama, es porque pensaste que está dormido.

- Si –. Le digo a Ángel.

- Bueno no importa. Desayuna primero y después te bañas. Me dice mi hermano.

- Ok.

Cuando Ángel me está sirviendo el desayuno Miguel me dice – Dormiste un poco Luna –.

- Sí. Le contesto.

En ese mismo momento entregándome el plato del desayuno Ángel me pregunta por Angelín, y le digo que está en el baño. Al termina de desayuna e intentar lavar el plato, Ángel me dice – Deja el plato allí, yo lo lavo. Mejor termina de beberte el jugo, para que te vayas a bañar o se te hará tarde –.

- Ok, gracia por el desayuno. Le digo.

Al terminar de beber el jugo colocar el vaso en el lavaplatos, mi hermano se levanta del mesón y camina hacia el lavaplatos. Pero antes de salir de la cocina, miro a Miguel y digo – Ángel, puedo hacer una pregunta que tengo desde hace meses –.

- Si dime Luna –. – Porque cuando Alan busco mi nombre, en la base de datos de los niños nacidos vivos del Hospital Central de Nueva York. No aparecía mi nombre sino el de otro niño –. – La verdad Luna es que tú no naciste aquí. Naciste en Colombia, antes de que tu nacieras sucedieron muchas cosas. Que en otro momento te lo voy a contar –.

- El Clan intentó matarme antes de nacer; verdad.

- Si, Luna. No te voy a negar. Pero ya te lo dije en otro momento te contaré todo. Será mejor que subas a bañarte, o llegaremos tarde; tú al colegio y yo a universidad.

- Ok. Le digo a mi hermano y salgo de la cocina. Subo las escaleras, antes de entrar a mi cuarto, miro si él de Angelín está abierto y noto que está cerrado. Entro a mi habitación me quito la bata y tomo la toalla.

Después de 15 minutos salgo del baño y entro a mi habitación, sacó del closet el uniforme y me cambio. Al terminar de cambiarme, tomo mi morral que se encuentra en la silla de mi escritorio y salgo de mi cuarto; bajó las escaleras y colocó el morral en el mueble de la sala y noto que el de Angelín no está. Camino en dirección a la cocina, y entrado digo – Angelín todavía no ha bajado –. – Acaso está ciega, no ves que estoy aquí –.

Los Hijos De La Luz Ángeles & DemoniosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora