Simplemente yo

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Malditamente mala, cansada de ocultarlo y pretender que toda la mierda que dicen no me afecta. Pues a la mierda que lo hace, MIERDA Y MAS MIERDA.
Que conste que lo trate con ganas por estos últimos 8 años, eso de ser la puta “mejor” versión de mi. Pero a la verga que me canse de complacer a gente que ni siquiera le importa si me disparo entre ceja y ceja. Voy a hacer lo que hace mucho me aguante, sin joderme en pensar que dirán o cómo diablos lo tomaron al enterarse.
Abortando desde los 15 de edad, llena de tatuajes a los 16, fumando a los 17, trabajando a los 18, dejando la universidad a los 19 y decidiendo a mis 20 años de edad limpiarme mi sexy culo moreno con sus opiniones sobre mí. Claro está, son libres de juzgarme hasta por respirar.
Pues claro nadie habla de cómo a mis 15 tenía las mejores notas del país, como a mis 16 dominaba  cuatro idiomas, a los 17 me diagnosticaron bipolaridad o eso creía el psiquiatra, a los 18 luche yo sola con mis demonios internos, ya que mis padres huyeron de su horrible carga y la otra porquería sobre mi mierda es historia para otro día.
Tengo un apartamento que con mis inteligentes ahorros alquile, tengo un trabajo tan inestablemente como yo misma y una falta de amor del tamaño del continente africano. Pero a pesar de todo sigo aquí, luchando con garras y dientes en la putada de vida que diosito me otorgo, digo que como mínimo asesina en serie fui para tener este rembolso de porquería; vaya uno a saber cómo fue mí quizás no tan agraciada vida pasada.
Mi canción favorita suena, a la mierda lo malo mientras tenga cerca una buena canción que me amargue la existencia y a la vez me alegre esta triste alma mía. Después de todo dicen que lo que no te mata te hace más fuerte, al carajo solo a la música le doy el derecho a destruirme y reconstruirme.

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