Era Vital:"La séptima alma" [Pausada]

Capítulo 15:"Busca la muerte y la encontrarás"

Me dirigía contra Berol por un combate a muerte para salvar la vida de Xeloc, pero Daniel se me adelantó para detenerme, me puso la mano enfrente a mi pecho y me dijo con voz seria y seca, que daba a notar la preocupación que sentía por la locura que iba a cometer ahora.

-Tranquilo Alex, escuchame, piensa en lo que vas a hacer, estas apunto de iniciar una pelea a muerte con un Alfa, ni siquiera Xeloc le pudo vencer y no creo que tu entrenamiento fuera tan duro como para poder pelear contra él- Dijo preocupado, no era para menos aunque no haya podido ver toda la pelea, intuía que Berol era un fiero guerrero que me podía matar con solo quererlo, y según creo es lo que más deseaba en este instante.

-Ya sé eso Daniel, pero no puedo quedarme aquí viendo como matan a Xeloc, además si se va así como así, seguramente les dirá a nuestros enemigos nuestra ubicación, mira todo esto comenzó por que Xeloc me salvó, no puedo quedarme así y ver como muere, está vez debo ser yo el que los salve, esta vez los salvaré a todos- Más que mi vida, estaba preocupado por la de los demas, si él llegase a informar a los otros de este lugar, este sería el escenario de una terrible batalla que seguro no ganaríamos.

-En eso te apoyo, pero no veré como asesinan a mi mejor amigo, y menos si yo le pude haber detenido, así que ¡Detente Alex!- Gritó, estaba un poco alterado, después de todo un amigo es algo preciado.

-Lo lamento, pero está vez no puedo retractarme Daniel, debo ir a enfrentarlo, escapar ya no es una opción que pueda utilizar para salvarnos, además creo que esa nunca lo es- Dije y quité su mano, encamimandome hacía una muerte casi segura a manos de Berol, pero otra vez Daniel me detuvo con su brazo, pero sólo para decirme algo por lo bajo.

-Está haciendo trampa, su cuerpo está rodeada por un escudo, pero eso no es lo peor, su escudo es de un alma corrompida, vigila y espera la oportunidad, tratare de ayudarte de alguna manera y más te vale volver, por que esta vez te necesitarán- Me dijo al oído y se retiró a una orilla del campo para ver la batalla, mientras desenfundaba su ballesta y la mantenía oculta.

-Ese Dani, pudo comenzar la conversación con ese dato, así que recibe ayuda de algún humano, o alguien así ¿Eh?, eso es interesante, veamos ¿Quién sale victorioso?- Dije en un susurro para darme un poco de valor, entré y saqué mis dos dagas que estaban ya recubiertas por mi aura de color azul.

-Jajajajaja, aquel día tú debiste morir, pero todo se dio vuelta y terminó muriendo mi hijo, y yo terminé herido, que mal chiste, por cierto este es un regalo para ti, por aceptar el duelo, tu querido hermano Xeloc esta envenenado y la única cura la poseemos nosotros, bien dejemoslo simple, mátame y te la entregarán mis dicipulos, muere y ustedes dos se reunirás muy pronto en el otro lado, casi se me olvida, sólo tienes media hora para salvarle, después de eso nada le surtira efecto y sólo le esperará la muerte- Dijo y se transformó en un humano de tes morena, pelo obscuro como carbón y unos ojos amarillos que parecían pequeñas flamas, yo estaba asustado por todas las condiciones que me había puesto en tan sólo unos momentos, tiempo límite, la vida de mi hermano y además la mía, el lujo de perder se veía cada vez más lejos.

-Comencemos- Grité, y Berol saltó convertido en lobo y yo con mis dagas esperando su ataque, saltó con fuerza en busca de mi cuello como un vampiro, pero encontró tan solo mis dos dagas, eludí su ataque, pero solo fue el principo, en cuanto Berol tocó tierra saltó otra vez con más velocidad y fuerza.

Cada vez me costaba más mantener su ritmo, y él me presionaba con más fuerza, hasta que me golpeó con su espalda y luego se lanzó en picada contra mí, obligándome a dejar mis dagas entre sus dientes para evitar las mordidas, senti como la presión destruía todo mi equilibrio por unos momentos lo soporte, pero su cuerpo era muy pesado y terminé cayendo, mientras mantenía a un gigantesco lobo sobre mi, intentando matarme cada dos segundos.