POEMAS MALDITOS

Alianzas

La noche entra en su alma.
El descontrol se convierte en rey.
Encerrado en una celda de impulsos,
Libre, desata el animal que lleva dentro.
Esclavo de ese lobo que vive en él.

Pero hay momentos
En los que la Luna le acaricia la cara.
Vuelve la claridad y puede ver lo que ocurre.
Ve a todos los fantasmas, demonios y monstruos que lleva dentro.
Conciente, observa callado y los deja correr y saltar.

Evoca el Silencio, para que venga con las llaves.
Que le saque de aquella prisión y vuelva a esposar esas bestias.
Los árboles dan la bienvenida a esta tranquilidad.
El chamán cojeando se acerca al lago y nada hasta el fondo.
Allí, con los ojos cerrados, espera encontrar la paz verdadera y esconderse de las fieras.

Pero se da cuenta de que no puede respirar.
La presión es tan fuerte que los pulmones se convierten en volcanes. 
Explosión fulminante, y la lava quema su cuerpo y su alma. 
Abre los ojos, rojos como brasas, y vuelve a la superficie.
Su pecho acoge el aire fresco y una nueva esencia.

Ahora puede hablar con sus demonios y con su propia paz.
Puede caminar junto con los árboles, las llamas y la lluvia.
Ha incendiado su antiguo hogar: demasiado pequeño para que convieran tantos espíritus.
Y vive libre en el bosque, vigilado por las estrellas,
Acompañado por sus demonios y guardianes,
Aprendiendo un nuevo camino.
La senda de la alianza: no destierres a tus demonios ni a tus guardianes, aprende de ellos como ellos aprenden de tí.
La unión de todas las partes de tu alma.