capítulo 4

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Después de la llamada telefónica por parte de Jiang Cheng y Xichen.


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"¿Wei Ying?" Lan Wangji va detrás de Wei Wuxian y se sienta a su lado en el asiento la ventana, moldeándose contra su espalda y envolviendo sus brazos alrededor de su cintura.

Wei Wuxian tararea, más por costumbre, al escuchar su nombre real. Él suena distraído. Mira por la ventana y sus ojos parecen estar muy lejos. Su copa de vino se encuentra en el alféizar de la ventana, medio llena, intacta durante la mayor parte de la última hora.

"Wei Ying" Wangji lo intenta de nuevo. Aprieta la cintura de Wuxian.

"Lan Zhan" La forma en la que dice su nombre es como un susurro de alivio. Se apoya contra el pecho de Wangji, deslizándose hasta que su cabeza se posa contra la hendidura de su hombro.

Un trueno retumba a lo lejos, y segundos después los relámpagos destellan. Wangji se une a Wuxian para observar como la lluvia cae en silencio.

"¿Deberíamos hacerlo?".

"¿Deberíamos hacer qué?".

"Regresar" Wuxian respira lenta y profundamente "¿Deberíamos ir a verlo?".

Wangji había esperado que el dolor de perder a las personas se desvaneciera, que el dolor de perder a Sizhui no una, sino dos veces en su vida ya hubiera disminuido, pero nunca lo ha hecho. Y probablemente nunca lo hará. Solo el escuchar su nombre se siente como un golpe en el pecho del cual luchará para recuperarse en semanas.

"¿Que quiere hacer Wei Ying?".

Los hombros de Wuxian tiemblan mientras respira, y Wangji aprieta su agarre, para tratar de exprimir toda su tristeza y dolor, para que se filtre hacia su cuerpo. Wuxian se ve muy triste. Se veía muy triste y distante, debido a la llamada telefónica que recibieron de sus hermanos.

Su Wei Ying nunca debería estar triste.

"Quiero ser egoísta" susurra Wuxian, como su fuera un secreto. "Quiero verlo. Lo extraño todo el tiempo, Lan Zhan. Todo el tiempo".

Wangji presiona sus labios contra la frente de su esposo. "Yo también". Apoya su barbilla contra su cabeza.

"Quiero verlo, pero tengo miedo. No podemos quedarnos con él" la voz de Wuxian se rompe "Ni siquiera sabrá quienes somos".

"Me sorprende" dice Wangji después de un momento "como es que hermano y Wanyin fueron capaces de tenerlos tan cerca".

Aún no se habían atrevido a regresar a China para vivir allí. Han ido de visita varias veces a lo largo de los años para ver los cambios, pero aún no habían visitado sus templos. Todo lo que saben es lo que oyen de sus hermanos, que se mantienen mucho más involucrados de lo que cualquiera de ellos podría soportar.

"Lo sé" Wuxian se ríe. Suena miserable, es solo una risa falsa. El corazón de Wangji duele. "No sé cómo lo hacen. Son mucho más valientes que yo".

"No" refuta Wangji de inmediato. "No son más valientes. Ellos tuvieron experiencias diferentes". Gira la cabeza y apoya su mejilla contra el cabello de Wuxian. El olor de su shampoo aún persiste, a pesar de que ha pasado un día completo desde que lo lavó. "Wei Ying es el más valiente".

Wuxian simplemente tararea de nuevo, una sonrisa tirando de sus labios. "Dijeron que está sano, eso es bueno".

"Y ha encontrado a Jingyi esta vez".

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