Tú Si Eres Ladilla Garfio || Thomas Doherty

Soy yo nojoda

Marico, yo paresco un pato, vivo cagandola.

Es que yo sabía que mami no me tenía que dar a luz CERCA DE LA PLAYA.

Mis ojos seguían recorriendo el hermoso rostro lleno de pecas, es real. Estoy frente a Cameron Boyce.

Y le dije mamaguevo.

Y también le tire el chocolate encima.

PEGUENME UN TIRO.

—Y-yo marico, yo no quería perdón. Es que me arreche porque tenía tiempo sin tomar Toddy y hoy que por fin volví a tomar, se me cae al piso, senda gafa que soy, digalo ahí— dije todo eso rapidísimo, dudo que me haya entendido una mierda. —Estoy hablando mucha paja, ¿verdad?

—No entendí ni la mitad de lo que dijiste...— SU VOZ EN VIVO ES PRECIOSA, ME VA A DAR ALGO. —Yo también lo siento, no te ví.

MARICO ES TAN CUCHI DIOSMIO, LO AMO

Caí en cuenta que andaba toda maricona en vez de ayudarlo con su camisa.

—¡Marico tu camisa! Eso debe valer más que mi vida y la de Chávez juntos, nawara, disculpa— le hice un puchero, le había cagado la camisa.

—No te preocupes, me cambiare en un momento. ¿Qué haces aquí?— aún no supero que Cameron Boyce me este hablando ok.

—Estoy en una audición... ¡MIERDA LA AUDICIÓN!— ya van a dar los resultados y yo botando la baba. —Mira pana, te admiro mucho, eres lo más bello que he visto en mi asquerosa vida, no sé cuando coño te vuelva a encontrar, te amo. Me tengo que ir.

Y sin decir más nada salí esmachetá a la sala de espera, abrí la puerta y ahí estaba mi nueva amix buscandome con la mirada, me pose a su lado como si hace un minuto no me hubiera topado con Cameron Boyce.

Brutal.

—¡¿Dónde estabas?!— me pregunta.

—Conocí a un ángel.

—Me cuentas después, ya van a gritar el top 3.

Dicho y hecho. Salió el mismo carajo que me había llamado para entrar, con una hoja de papel en mano. Amanda y yo nos agarramos de las manos fuertemente. Que nervios.

¿Y si no quedaba?

—¡Verga pero apurate nojoda!— exclame, el chamo me vió feo, ups.

—Amanda Clark— aprete la mano de Amanda, la cual estaba que brincaba de felicidad. —Clarissa Eliotts, y...— Y QUÉ MAMAGUEVO? —Alissa Oropeza. El resto se puede retirar, gracias por venir.

Quedé

Marico

QUEDÉ

NO PUEDE SER, QUEDE EN EL TOP 3

—Lissie, ¿estás bien?— aún no lo asimilaba.

—¡QUEDÉ!— Me levante de la silla y la jale para darle un abrazo. —¡QUEDAMOS MARICA!

—¡QUEDAMOS!— chillo con emoción, brincando a la par conmigo. No lo supero diosmio.

Las muchachas que desalojaban el área nos miraron raro y otras sonreían.

La dicha no me cabe en el cuerpo mrc.

Quedabamos nosotras tres, a la que no conocía era a la chama que estaba en una esquina, sin pararnos bola. Como andaba feliz, me acerque a felicitarla también, nawara, quería transmitirle mis buenas vibras a todo el mundo.

—Felicidades chama— le sonreí sinceramente.

La tipa subió la cara, me vió de arriba a abajo y puso cara de culo, más de la que ya tenía.