Intente destruirla para así deshacer lo que por ella sentía y no quería admitir.
La ví en agonía, suplicarme por su vida.
Hice como si no me importará, pero cuando me di cuenta que estaba en sus últimos alientos de su bella existencia, pude aceptarlo.
Estaba locamente enamorado de esa linda chica y sin embargo, pensaba que no estaba preparado para dejar que alguien controlará mi enigmática eternidad.
Ella pudo romper la coraza que cubría mi corazón y entrar sin ninguna condición.
Antes de ella a ningún ser le tenía compasión, y ahora heme aquí, poniéndola por encima de cualquier cosa y persona.
Es mi debilidad, la única que me hace amar y razonar.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
