Te amo...

804 91 13
                                    

. Editado

Se encontraba solo en aquel salón ya que no quería moverse, no aun. 

Cuando se levanto de tu pupitre y vio hacia atrás se encontró con un pecoso.

Bakugō: De... Izuku – la figura del pecoso que una vez hizo que su corazón salte de emoción

Su estómago se llenará de aquellas mariposas y que no dejara de pensar en él ni un solo segundo, el que quería nombrar como su otra mitad.

Bakugō: Te amo... – su corazón fue más rápido que su pensamiento y dijo aquello sin dudar

Aquellas dos palabras que eran un gran significado para ambos.

Midoriya: Oh Kacchan... – empezó a llorar – ¿P-por qué?

Pero ya eran muy tarde para decirlas.

Midoriya: ¿Por qué no me habías dicho eso cuando aún estaba vivo?

Bakugō parpadeo, se sentía mareado y sentía que el aire escapaba.

Cuando se recupero el pecoso ya no estaba ahí.

Re-cortes - FinalizadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora