Capítulo 10

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Kirishima al salir de la habitación de Takafumi se dirigió al comedor para poder desayunar ya que desde que despertó no lo había hecho y no pasaban mas de las 10 de la mañana.

Cuando entró en el comedor vio a sus amigos y a Yuu desayunando plácidamente, estos al ver a Zen entrar rápidamente se inclinaron ante él.

- Vaya, creí que desayunaria solo hoy, díganme por qué están aquí tan tarde?- cuestionó sentándose en medio de todos.

- Digamos que no fuiste el único que se divirtió anoche- dijo Ijuin observando a un muy sonrojado Yuu.

- Kyo!- le reclamó Yuu pisandole un pie a Ijuin por debajo de la mesa.

-jajaja, tranquilo Yuu no tienes de que avergonzarte, todos aquí sabemos que Kyo es un pervertido de primera- Kirishima empezó a reír junto a Hatori y Nowaki.

-Y tú como pasate la noche Zen, el doncel valió la pena o fue solo uno más del montón?- preguntó Hatori.

- Ese doncel es lo más hermoso que vi, su carácter, su cuerpo, su rostro todo de él es perfecto, sin duda fue la mejor noche de mi vida- dijo Zen recordando todo lo que había hecho con Takafumi la noche anterior.

-  Si es como tú dices, entonces creo que pediré su presencia esta noche en mi habitación- dijo un despreocupado Nowaki, pero al ver a Zen sintió un poco de miedo ya que el rey lo miraba como si quisiera matarlo.

- Ni se te ocurra, queda terminantemente prohibido que Takafumi se acueste con alguien más, él es solo mío- Zen alzó la voz dirigiéndose a todos los presentes- Yuu ya que tú eres el encargado del harén diré esto sólo una vez, desde este momento Yokozawa Takafumi se convirtió en mi favorito todo aquel que ose tocarlo será castigado de forma severa.

Todos en la sala quedaron sorprendidos nunca había visto que Zen se pusiera posesivo con un miembro del harén.

- Quedó claro lo que dije.

- Si su majestad- respondieron todos al unísono.

- Muy bien, Yuu ya le asigne una habitación a Takafumi, se encuentra a dos habitación de la mía, por favor ve y llevale lo que él pida de desayunar, desde ahora tendrá todos los lujos de este reino.

- Si su majestad- respondió Yuu un poco asustando por la actitud del rey- majestad hay algo que quería preguntarle, es sobre los amigos de Takafumi- desde que despertaron Chiaki y Hiroki no dejan de preguntar por Takafumi.

- Qué pasa con ellos?- preguntó renuente Zen.

- Ellos están muy preocupados y quieren ver a Takafumi, mi pregunta es si los dejará hacerlo.

- Si Takafumi quiere verlos, lleva los a su habitación, pero él no puede moverse de la cama, debe recuperarse según el doctor lo mejor es guardar reposo- Zen no impedirá que su doncel vea a sus amigos, de echo ellos son la mejor carta que tiene para que Takafumi se enamore de él.

- Recuperarse?... su majestad no me diga que lo...- Yuu no pudo seguir hablando ya que el rey lo detuvo.

- Yuu te di una orden, no deberías estar aquí cuestionando mis acciones- enfadado Zen se levanto de su silla.

- Lo siento su majestad, me retiro- así salió del comedor un enojado y asustado Yuu por las acciones de su rey.

- Deberías tranquilizarte Zen, asustaste a Yuu y parece que Nowaki quiere salir corriendo de aquí- Ijuin hablo molesto por el tono que uso el rey con Yuu.

- Ey! eso no es cierto- exclamó Nowaki- es sólo que me impresionó tu forma de actuar Zen nunca te había visto así, tan posesivo con alguien.

- Es cierto, ni cuando éramos niños te portaste de esa forma, que te hizo ese doncel para que actues así?- cuestionó Hatori preocupado por su amigo.

- No lo se, es solo que él es especial, no es como otras doncellas o donceles, él es fuerte, tiene carácter, estoy enamorado de él- todos quedaron sorprendidos por las palabras de Zen, por primera vez su amigo se había enamorado.

- Si ese doncel es el que elegiste, nosotros te apoyamos- dijo Ijuin feliz ya que su mejor amigo había encontrado el amor- solo espero que logres que él te ame.

-Lo hará, no tendrá otra opción- Zen estaba decidido, si quería tener a Takafumi para él debía usar sus cartas o mejor dicho a los amigos del doncel.

- Entonces, buena suerte- dijeron los tres con una sonrisa.

-Ahora cambiando de tema, debemos hacer los preparativos para la fiesta de por nuestra victoria- cada vez que Marukawa ganó en las batallas, Zen realizó una fiesta, esta no sería la excepción.

- Tienes razón, mejor empecemos con los preparativos- así los 4 hablaron sobre todo en lo que respecta a la fiesta.

Mientras tanto Yuu llegaba a la habitación de Takafumi, tocó la puerta dos veces pero no recibió respuesta, volvió a intentar pero fue en vano. Decidió entrar y lo que encontró fue a Takafumi dormido y con rastros de lágrimas secas en su rostro.

- Lamento no haber podido hacer algo para que evitaras haber pasado la noche con el rey- Yuu movió un poco a Takafumi para que despertara y lo logro, el peliazul empezó a abrir los ojos y se asuste al ver un cabello castaño, del susto retrocedió a la cabecera de la cama.

- Tranquilo, soy Yuu, no tengas miedo- al ver el acto del doncel Yuu trato de tranquilizarlo.

-Yuu, en que haces aquí?- ya completamente despierto Takafumi preguntó por la presencia de Yuu.

- El rey me mandó a ver que querías desayunar- Yuu le regalo una sonrisa para que se tranquilice.

- Ahora ese bastardo se preocupa por mí, es un infeliz, no se preocupo cuando me...- guardo silencio al darse cuenta de lo que estaba apunto de decir.

- Él te lastimó, verdad?- preguntó Yuu recibiendo un asentimiento de parte del oji azul.

- Fue horrible, todas las sábanas estaban manchadas con sangre, mi sangre!- una vez más Takafumi rompió en llanto- y ahora se preocupa por mi?, no le importó nanda, nada, es un maldito- Yuu solo pido ir a abrazarlo, él ya conocía el dolor que sentía Takafumi.

Takafumi lloraba y lloraba en el hombro de Yuu, recordando todo lo de la noche anterior, las caricias, las mordidas, como le quitó la virginidad sin preparación, los besos y como el rey se había venido cinco veces en su interior. Al recordar eso también recordó las palabras del rey « quiero que tú tengas a mis hijos, tú me darás a mis herederos»

No él no planeaba quedar embarazado tan joven, él no quería, en especial de ese hombre que tanto odia, y recordó algo que había aprendido en Invierno.

- Yuu... tengo hambre- fue lo único que dijo para empezar con su plan.

- No te preocupes yo te traeré todo lo que me pidas.

- Podrías traerme algunas hierbas, me preparare algo para el dolor que siento.

- No te preocupes, pediré que te hagan algún remedio para eso- Yuu estaba apunto de salir pero Takafumi lo detuvo.

- No!... yo conozco una receta especial para eso, por eso quiero prepararlo yo, por favor.

- Está bien que hierbas quiere que te traiga- así Takafumi le dio una lista con hierbas un tanto raras pero que todo palacio tenia en la cocina, después de unos minutos Yuu regresó con todo lo que le había pedido el oji azul.

- Donde aprendiste a hacer un té de hierbas como estas?- preguntó Yuu un tanto extrañado ya que la combinación de las hierbas que había pedido Takafumi era algo extraña.

- Yo trabajaba en un restaurante en mi reino, la dueña era una señora de 70 años, ella me la enseñó- recordó con algo de nostalgia a aquella anciana que lo había ayudado a protegerse de los varones.

- Listo, con esto el dolor desaparecerá- Takafumi tomo el té que había preparado.

-« estoy seguro que con esto evitare quedar embarazado de Kirishima»- pensó Takafumi mostrando una sonrisa, pues el té era como un preservativo ya que al tomarlo las posibilidades de quedar embarazado eran nulas.

El FAVORITO DEL REY (Nuevo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora