CAPITULO 23: MAS SORPRESAS

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Después del suceso con Jake en la puerta de nuestra casa, subí corriendo a mi habitación con lagrimas en los ojos, no podía procesar todo lo que me había ocurrido esta noche, era demasiado para mi.

Yo solo era una simple chica que durante su infancia no había tenido amigos a su alrededor, durante la época del instituto encontré a mis mejores amigos de hoy en día, por lo que salir o besar a cualquier chico no estaba a mi alcance.

Y esta noche... todo de había vuelto diferente, el beso con Harry fue increíble pero no estaba preparada, me pilló de improvisto.

Y el beso con Jake... eso si que no me esperaba, me decía a mi misma que eso había ocurrido porqué él estaba borracho y lo habría hecho con cualquiera, que mañana no se acordaría de nada...

Con esos pensamientos me hice un moño en lo alto de la cabeza y me dispuse a cambiarme de ropa y a desmaquillarme.

Sorprendentemente, eran las 2:30 de la mañana pero no tenía ni una pizca de sueño, por lo que me puse una mascarilla en la cara y me tumbé en la cama a ver una película de Netflix.

Al poco tiempo me quedé dormida en la cama.

- Nora... estás despierta?- dijo una voz masculina mientras entraba en mi habitación y cerraba la puerta detrás.

Me incorporé en la cama para ver quien era y cuando el intruso encendió la luz de mi habitación pegué un grito, y a los pocos segundos él también lo hizo.

- Harry, Dame una buena razón para que entres en mi habitación mientras yo estoy dormida, y dame otra razón de porqué tienes la cara llena de moratones- dije enfadada mientras agarraba fuerte las sabanas, tan solo llevaba una camiseta ancha y mi ropa interior.

- Demasiadas cosas quieres que te conteste- dijo Harry mientras se sentaba a los pies de mi cama- yo solo quiero que me digas una cosa, ¿porque tienes la cara negra?- dijo haciendo un gesto con las manos mientras se señalaba su cara.

- DIOS!!!- dije levantándome lo mas rápido que pude, entre en el baño y me miré en el espejo, mierda, se me había olvidado quitarme la mascarilla y ahora tenia la cara irritada y no me salía.

- ¿Necesitas ayuda con eso?- dijo Harry entrando en el baño conmigo y cerrando la puerta.

- No creo que sea necesario, solo necesito una toalla y agua para quitármelo- dije mientras buscaba una toalla con la que pudiera quitármela, no quería mirarle a los ojos, me ponía demasiado nerviosa.

- Nora, siéntate y déjame que te ayude, así será mas fácil- dijo con voz dura mientras me quitaba la toalla de las manos y me hacía un gesto con la cabeza para que me sentara.

Harry humedeció la toalla en el lavabo y se arrodilló delante mía, ya que así seria mas fácil, ya que la diferencia de altura era notable.
Se quedó unos segundos mirándome, debatiendo algo que no podía descifrar en sus ojos.

Empezó a quitarme la mascarilla negra por la frente, yo hacia muecas de dolor ya que tenia la cara muy irritada por llevar la mascarilla mucho más tiempo.
Una vez terminó mi frente, bajo a mis mejillas, y cuando iba a quitarme la parte de la barbilla, apartó la toalla y con sus dedos me tocaba mi labio inferior, como si estuviera memorizando cada parte de ellos.

Cerré los ojos por el tacto que me proporcionaba Harry, me daban escalofríos y sentía mariposas en el estomago.
Cogió mi barbilla con su mano y se empezó a inclinar hacia mí, rozó su punto de la nariz con la mía, mirándome a los ojos fijamente con deseo.
Apoyó su frente con la mía, y me susurró:

- ¿Puedo besarte?-

Yo sin decir nada me incliné hacia él, con la intención de besarlo, cuando de repente, la puerta del baño se abre de repente, dejando ver a un Nick muy borracho y enfadado, esa mezcla no era muy buena.
Harry se levantó al instante y yo me quedé paralizada en el sitio, no podía moverme ni articular palabra.

- ¿Que coño está pasando aquí?- dijo Nick mientras se enfrentaba a Harry, estaban demasiado cerca para mi gusto.

- Nick, no es lo que parece, solo...- intenté decir pero mi hermano me interrumpió.

- ¿Que no es lo que parece?, tu me tomas por tonto, ¿verdad?- gritó Nick tocándose el pelo y estirándose las puntas.

- Nick, venga tranquilízate, no estábamos haciendo nada...- dijo Harry bajando la mirada.

Nick nos fulminó a los dos con la mirada y sin decir nada salió del baño, entró a su habitación y pegó un portazo.

Harry intentó decirme algo, pero levanté la mano para que no dijese nada, una lágrima cayó por mi mejilla, y como había echo mi hermano, me levanté y me fui a mi habitación. Nunca había visto a mi hermano así...

Independizarme con 4 playboys, mala ideaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora