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-Te juro que no sabía lo que hacía, ¿como pudiste escapar de mí así? ¿como pudiste decidir que solo se iba a acabar lo nuestro?¿no piensas hacer nada? Yo te amo y no lo entiendes, déjame demostrarte que podemos estar juntos.
-Zayn, debemos acabar con esto.
-Dame un motivo por él no puedes perdonarme.-roguó.
¿Debía decircelo o debía desaparecer de su vida sin dejar rastro de mí? No quería verlo sufrir, no lo soportaría.
Recordé que el no creía en el amor, recordé que el no era un soñador, recordé que el no podía sentir y me sentí morir al darme cuenta que se había enamorado de mí.
Estos últimos días habian sido un infierno para mí, me sentía tan sola, me sentía tan vacía sin él,mi madre nunca había estado para mí en todos estos años y ahora ¿Quería hacerse cargo de mí? ¿Quería llevarme a otro país que no conocía con su familia? ¿Quería alejarme de la primera persona que eh amado?
-Tu no mereces esto Zayn, debes dejarme ir. Mañana me iré del país, y no puedo hacer nada.- Sentí mis ojos arder e hice un lado a Zayn y salí corriendo, no sé cuanto tiempo ni por donde corrí solo fui lo más rápido que pude, sentía que me hundía, sentía que me moría, sentía cólera.
Tenía tantas ganas de abrazarlo y estar con él siempre, quería besarlo y olvidarlo todo, quería olvidar sus errores, quería quedarme aquí, donde tenía un hogar, no quería irme. Zayn era perfecto, él me había amado y estaba tan asustada por eso, ¿por qué de mí? ¿Que no se da cuenta que no valgo todo lo que sufre?
Pasé por una farmacía y me di cuenta que estaba cerca de mi casa, pero no quería ir allí, volvería a pelear con mi padre y era lo menos que quería. Definitivamente ver a Zayn fue lo más doloroso de estos últimos días. Volteé y lo ví, venía corriendo hacia mí, apenas lo ví empezé a correr con todas las fuerzas que tenia, y sabia que era una corbarde, pero no podía. Corrí y tropezé con un bache que había en la acera- Mierda-gruñí entre dientes y me paré denuevo y me heché a correr, sabía que mi pie se habia lastimado pero no quería verlo. Sentí pasos detrás de mí y aceleré pero él era más rápido que yo; era inutil. Llegamos al final de la cuadra y volteé hacia una avenida tontamente.- Hey, cariño, por favor no lo hagas más dificil- lo sentí detrás de mí pero yo no me detuve- Tenemos que hablar, para de una vez.
Me invadió un sentimiento de culpa al escuchar el sonido tierno con el que me hablaba, volteé manteniendo mi distancia- Déjame.
-Ven, acercate.
-No, quiero que me dejes.
-Me arden los brazos de querer abrazarte, por favor.
-¡¿No escuchaste lo que te dije?!-Su mirada bajó a mi pie.
-Vamos, ví que cojeabas.
-No, yo puedo cuidarme sola.
Avanzó hacia mí y trate de retorceder pero no quería llegar hasta la pista así que solo deje que me alcanzara.
-Ven, cariño- pasó sus manos por mi cintura y dejé mi cuerpo caer sobre él, sabía que el me iba a sostener, me abrazó fuerte y trate de resistirme pero; ¿a quien engañaba? lo necesitaba tanto. Y sabía que el no me había entendido, tenía que terminar con él, nunca nos volveríamos a ver.- ¿Puedo cargarte? Hay una farmacia cerca, puedo comprar algo para el dolor y después podemos ir a tu casa o a la mía, como quieras, yo no tengo problemas.
