Don't set me free [Calum Hood Hot]

"Tranquila nena..."

Ella llevaba la delantera, y tanto que la llevaba.

Los dos estaban exhaustos pero ella había vuelto a conectarlos de una manera brusca y sin pensar.

Él nunca se hubiera imaginado que eso podía haber sido el siguiente paso, ni siquiera lo había planeado así.

Ella no se movía, no realizaba ninguna sacudida hacia el cuerpo de él, solo quería sentirle cerca, muy cerca.

Se separaron pero no como él pensaba, ella tan solo había hecho que él saliera de su interior pero había escurrido su mano hacia el miembro erecto de este.

Lo masajeó, una y otra vez.

Sentía como el chico se excitaba cada vez más.

Sentía como ella misma se excitaba, como entre los dos volvían a sentir esa sensación.

Sensaciones, hay momentos que muestras mil sentimientos a la vez pero no es solo eso lo que mueve el amor, también son las sensaciones, esas que pueden mostrar muchos de los elementos del universo en los que nunca pensamos pero que a veces intuímos.

Ellos siguieron, sin despegarse el uno del otro, había momentos que eran para disfrutar.

Y ese era el momento perfecto.

Sus cuerpos no volvieron a conectarse pero sí se abrazaron, como nunca ninguno de los dos había hecho antes.

Poco a poco la excitación iba disminuyendo hasta poder mantener una conversación que duro menos de dos minutos pues él empezó a acariciar la cadera de ella de una manera sexy y seductor a la que ella no se pudo aguantar ni soportar.

"Tranquila nena..." -dijo él al notar sus temblores.

Sí, estaba nerviosa, él causaba esa extraña sensación en ella.

"...todo está bien"-continuó tras una pequeña pausa.

Él le miró mientras sonreía dulcemente.

Quizás ninguno sabía lo que estaba pensando el otro pero por un momento pareció que Calum hubiera entrado en la mente de ella pues había acercado su cara con la intención de besarla.

Y así hizo, la besó.

El único beso que ella sintió de una manera diferente y por el que más de una palabra se hubieran dicho el uno al otro cuando este terminó.

Él sintió como su corazón se aceleraba de una manera tonta e innecesaria cuando la chica que estaba a su lado salió de la cama dejando a la vista cada parte de su cuerpo que le traían loco.

Locuras, una de las mil cosas por las que la gente define el amor pero estas sólo se realizan por personas que de verdad te importan, por las que verdaderamente darías la vida.
Te lo definirán de mil maneras pero hasta que no realices una locura por amor nunca sabrás lo que se siente o lo que eso puede llegar a significar.

La chica comenzó a contonear sus caderas mientras recogía cada una de sus prendas para a continuación dirigirse a la puerta que llevaba al baño de la habitación.

Había ido directa al baño y él se había quedado allí, quieto, intentando analizar lo que había pasado y encontrarle un razonamiento lógico a lo que acababa de ocurrir en su interior y también si lo que acababa de hacer ella era una clara o no tan clara indirecta.

Los dos se excitaba mutuamente y aunque ella nunca se hubiera imaginado haciendo alguna de estas cosas, al final había llegado el momento o incluso la persona indicada con la que todos esos pensamientos que en algún momento había tenido que olvidar habían aparecido estrepitosamente

Tras mucho dudar y que todo su cuerpo sintiera un leve escalofrío al recordar el momento, el chico se decidió a actuar.

Esto no era algo normal para él pues ninguna de las chicas con las que se acostaba le hacían sentir nada pero lo mejor de todo es que nunca había probado a hacerlo en una ducha.

Era un mujeriego, y siempre había hecho honra a esa palabra por lo que ninguna chica con la que pasaba la noche había tenido el placer de compartir un baño con él pues ni siquiera estaba cuando ellas se despertaban por la mañana.

Quizá está chica sea diferente, quizás le haga cambiar de una vez por todas.

Se aproximó lentamente a la puerta donde dentro estaba esa muchacha que le había traído ya más de un dolor de cabeza, pero que se puede hacer cuando uno está enamorado.

Sí, hablo de amor aunque él ni siquiera tenía esa palabra en la cabeza.

Para él ese sentimiento extraño que había invadido su cuerpo minutos atrás tan sólo había sido un calentón, con el cuál pretendía acabar rápido.

Enamorarse, uno de los mayores miedos de miles de personas.
No hay más que hablar del mal de amores, de no ser correspondido, del miedo a ser rechazado, todo ello son pensamientos típicos con los que tú mismo te auto convences para no pensar a lo loco.
El amor es simple, quizás pocos de vosotros creáis en que pueda ser a primera vista pero la pregunta es: ¿por qué no?

Él entró deprisa, tampoco quería que nadie se diera cuenta aunque en esa habitación únicamente se encontraba él.

Se le quedó observando, le parecía divertido pues en su cara estaba bien definida una sonrisa.

¿Qué mejor manera de terminar con todo que el sexo?

Que fácil se ve todo desde esa perspectiva,desde la plena ignorancia de los sentimientos.

¿Qué ocurriría si dos personas que nunca se han enamorado de repente lo hacen?