Extra

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"Cuanto más profunda es la herida, más privado es el dolor."

Isabel Allende.

Nowhere but spring

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Nowhere but spring

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Las pesadillas se volvieron cada vez más frecuentes junto a los gritos en medio de la noche, a vece, podía ver los sangrientos cadáveres de su victimas acumularse en una pila impidiéndole olvidarlos tan fácilmente como a ella le gustaría. Natasha recordaba con claridad sus nombres, sus facciones corporales, sus miradas de sufrimiento. Podía distinguirlos con facilidad entre cuerpos flácidos amontonados en el frío suelo del callejón.

Esa noche en particular, el sonido tan característico de las zapatillas de ballet bailando firmemente contra el suelo resonaba en el silencio de su mente moviéndose con gracia de una posición a otra.

Primera posición. El arma apuntaba directamente a la cien del hombre barbudo, su nombre era Pavel y tenía esposa e hijos. Nunca olvidaría sus ojos marrones brillando de angustia y sus gritos suplicándole que no lo hiciera.

Segunda posición. Sus dedos envolvían la pistola rosando el gatillo firmemente, sin dudas ni hesitaciones.

Tercera posición. Podía observar con detalle el terror en los ojos enrojecidos de llanto, la desesperación de sus últimos respiros y la piedad que imploraban sus facciones. Ella suspiró esperando indicaciones para comenzar su jugada; no podía mostrarse débil por la miserable voluntad de un extraño que formaba parte de su encargo.

Cuarta posición. Sin parpadear, sin temblar, al escuchar atenta el comando apretó el gatillo decidida con una mirada neutra en el rostro.

Quinta posición. El cuerpo cayó sin vida contra el pavimento salpicando sangre a su alrededor.

Un nuevo cadáver fue agregado a la pila central ya formada, escurría sangre por su boca cubriendo a los demás cuerpos de la misma. Ella observó horrorizada como el espeso liquido corría y corría buscando expandirse a gran velocidad como agua de lluvia, a tal punto de llegar a sus pies manchando sus botas de combate.

Empezó a retroceder aterrada hasta darse cuenta que la sangre de sus víctimas se había acumulado y había sido mucho más rápida que ella. Al mirar nuevamente se encontró rodeada por un charco oscuro bajo la luz de la noche, un charco tan extenso cual propio lago carmesí...

──❀•❀────❀•❀──

Jadeante y sin aliento se despertó alarmada, inhaló y exhaló profundamente buscando calmar su respiración agitada. Trató de olvidar las monstruosas imágenes que la perseguían en su sueño. Natasha era fuerte, pero no podía negar que sus actos en la KGB la habían marcado de por vida, todas las muertes que tomó cual mártir la perseguían día y noche recordándole que sin importar sus intenciones de redimirse salvando a otros, tenía un pasado turbio que la convertía en la mala, en la villana, un pasado del cual no había escapatoria incluso con todas las técnicas que había aprendido.

Nowhere but spring | romanogersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora