Todo de mí

Capítulo 2

Emily

3 meses después

James es un pequeño travieso, con sus cortos tres meses ya puedo decir que será un niño lleno de energía, comencé hace un mes a trabajar en el despacho de Jordan porque le conté sobre todas mis preocupaciones, él me brindó nuevamente la mano que necesitaba, me hizo prometerle que terminaría mi carrera antes de ofrecerme un empleo, puedo decir por la reacción de todos sus nuevos socios que no es algo que acostumbre hacer, dar empleos de la nada no es un lujo que todos se puedan permitir.

También sé que él está pasándola mal por todo el pleito que hubo con sus padres, verlo salir adelante por sí mismo ha sido algo grandioso, sobre todo porque somos parte de este momento, todavía viene cada noche a mi pequeño departamento para ver cómo vamos James y yo, mamá es quien me ayuda con mi pequeño cuando voy a trabajar, soy muy consciente de que Jordan me da más flexibilidad en mis horarios porque hay veces que debo volver antes con James y no es algo que crea poder pagarle en un futuro cercano.

—Dulzura, ¿No es hora de que pases por Trevor a casa de tu mamá? —despego la vista del documento que estaba redactando para verlo con mi bolsa rosa de mano, me la ofrece para que lo siga así que lo hago hasta que entramos a su oficina.

—Sé que lo haces con buena intención, pero de verdad no creo que me debas dar más ventajas que al resto de los trabajadores—mi queja lo hace rodar los ojos.

—¿Quieres que pase por la cena está noche? —me enoja que no puedo enojarme con ese tema. Lo que sí me enoja es que evite el tema.

—Sí, pero me tocan los platos—no se niega a ello porque lo odia, es gracioso ver a este hombre con reputación de malvado actuar como pequeño para no lavar los platos, sin embargo, cada vez que le toca hacerlo lo hace de manera reluciente, puedo jurar que mi cocina nunca luce tan impecable como cuando él la limpia.

—Sobre lo otro, soy el jefe, puedo hacer lo que quiera y lo que quiero es que Trevor esté bien. Eso y que Jayden te está buscando.

Por primera vez volteo y veo al novio de mi mejor amiga sentado, por su expresión de desagrado no creo que vea algo que le guste, en cambio con cierto reproche comienza a hablar—Vaya, tres meses y ya actúan como si estuvieran casados—su tono solo me hace pararme de manera firme. Nunca me dejé intimidar por él y hoy no voy a comenzar.

—¿Exactamente cuál es tu problema con ello? —sueno más agresiva de lo necesario, pero me molesta que esté juzgando la amistad que establecí con su hermano.

—Dulzura—la advertencia de Jordan solo me hace respirar para tranquilizarme.

—Ustedes no están saliendo—esa es una obviedad que no logro entender y con honestidad no me interesa.

—No, ¿también tienes problemas con que no estemos saliendo? —Jayden se pone de pie para acercarse a nosotros. Hay algo diferente hay en él, pero no logro descifrar lo que es.

—Ya no le voy a mentir a Tyler, así que vengo a pedirte, no, a exigirte que vayas y le digas de Trevor. Ese niño tiene papá y no eres tú—señala a Jordan, no sé si lo notó, pero la expresión de Jordan marcó algo de culpa y dolor, lo cual no me gustó. Si hay alguien que no merece sufrir es Jordan que tanto me ha ayudado.

—Tú no tienes ningún derecho a hablarle de esa manera a tu hermano, no cuando él solo nos ha protegido y si tu amigo hubiera estado ese día en su departamento tal vez se hubiera enterado hace tres meses.

—¡Tyler te ama!

—Claro, tanto me amó que fue y se metió con otra y no solo eso Jayden, me juró ¡En mi cara! Que no había pasado nada, me engañó, me mintió y pretendió que todo siguiera igual. Si Andrea no hubiera salido embarazada jamás me hubiera dicho nada ¡Todavía estaría viviendo en una mentira!