campeón de un sueño lejano

capitulo 2

Capítulo 2: El Rey Diablo

Shirou se enderezó, sus manos se mantenían sueltas a los costados y sostenían las empuñaduras de espadas que aún no existían.

Había cuatro de esos lobos antinaturales saltando hacia él. El aura que desprendían no era diferente a los monstruos corruptos con los que había luchado antes. Una inteligencia salvaje, que no quiere nada más que mutilar, matar y devorar.

Un sonido imperceptible, y el acero apareció en lo que alguna vez fueron manos vacías. Hojas gemelas, negras en la izquierda y blancas en la derecha, paralelas a sus pecados de vida y muerte. Un diseño heredado de "él mismo" en el futuro, y en un camino que nunca eligió.

-Faltado. No tenían ni cerca del poder de las espadas casadas Kanshou y Bakuya que recordaba. Aunque las formas eran similares, la postura que adoptó le resultó familiar, no era más que una pálida imitación de los recuerdos que tenía de 'EMIYA'.

Shirou no podía recordar la historia. La imagen era vaga y el proceso borroso. Aun así, ese tipo lo había usado para matar a una criatura aún más monstruosa que los lobos que se le acercaban.

Para estos lobos, incluso una imitación hueca sería suficiente.

El primer lobo atacó con una estocada, su mandíbula se abrió para revelar unos colmillos malévolamente afilados. Rápido, una carga que un humano común no podría igualar.

Pero todavía era demasiado lento.

Un baile bajo la lluvia, una mente de acero y un cuerpo reforzado más allá de los límites humanos. Shirou dio un paso adelante y Kanshou cortó el aire de la noche, dividiendo al lobo por la mitad en toda su longitud, comenzando desde la mandíbula.

El sonido de cristales rotos. La espada curva negra que Shirou proyectaba se rompió, desapareciendo con una pequeña exhibición de luz. Pero no le prestó atención, sino que volvió su mirada hacia el próximo enemigo.

Otro lobo, ya en movimiento. Este saltó hacia adelante con las garras relucientes levantadas para perforar la piel de Shirou y derribarlo.

Shirou dio un paso adelante de nuevo, torciendo su cuerpo para levantar a Bakuya en un corte ascendente.

Como sus hermanos, ese lobo se partió por la mitad y volvió a las sombras.

De nuevo, el sonido de cristales rotos. El imperfecto Bakuya rompió en ese último ataque, dejando a Shirou sin un arma.

Los dos últimos lobos notaron su falta de espadas y atacaron como uno solo, un ataque desde arriba y abajo.

Pero su contraataque aún no había terminado. Con su mano sobre su cabeza, se formó una nueva espada y Shirou dio un paso adelante.

Una hoja de piedra maciza, agrietada y astillada por la imagen defectuosa que poseía de ella, reforzada para mantener su forma de un solo golpe.

Agarrando la espada falsa con ambas manos, Shirou la balanceó hacia abajo con una velocidad cegadora, diezmando por completo a los dos lobos y destrozando una porción del asfalto.

Al igual que sus otras proyecciones, la espada del hacha también se hizo añicos, dejando solo un suave toque de luz como evidencia de su existencia.

Shirou se enderezó, ahora que el peligro inmediato se había ido, e hizo una mueca cuando una ola de dolor pasó por su cuerpo, como la sensación de pequeños cortes en su piel. "Demasiado ese tiempo ... aunque me estoy acercando."

Todavía no podía realizar el refuerzo como solía hacerlo, pero estaba llegando, a diferencia de la primera vez que lo había intentado.

Ese recuerdo trajo una mueca al rostro de Shirou. Si no fuera por el hecho de que este nuevo cuerpo tenía habilidades curativas anormales y durabilidad, habría muerto la misma noche en que pudo comenzar su nueva vida. Sentir tu cuerpo arder y tus venas como si estuvieran llenas de fuego definitivamente no era algo que Shirou quisiera repetir.