Grabación 🔴
- Y ya se encuentra con nosotros la doctora que representó al país en la conferencia internacional de mejores doctores. Destacando por su habilidad, inteligencia y sobre todo belleza...doctora, gracias por aceptar esta entrevista.
- Oh, bueno...Sakura-san, gracias por tantos cumplidos. Me haras sonrojar.
En ese momento un moreno azabache aparecia por la puerta principal de su casa. Vio salir a una mujer de cabellos rosados de la habitación y le hizo una señal para que guardará silencio.
Se acercó hacia dos pequeñas cabezas que se asomaban detrás del mueble concentrados en lo que decía la televisión. Se acercó cautelosamente y los abrazo a ambos haciéndolos reir.
- ¡Hola chicos!
- ¡Papá!
- ¿Qué hacen? -. miro curioso la pantalla y sonrió.
- Estamos viendo a mamá en la tele. -. respondió el pequeño pelinegro riendo.
- ¿Otra vez están reproduciendo esa grabación? -. pregunto sonriendo.
- Si, pero ¿ah que se ve linda, papá? No nos cansamos de verla. -. respondió la pequeña mirando la pantalla.
- Se ve hermosa como siempre. Pero, ¿no preferirían ir a decirle eso personalmente?
- Ella ya lo sabe. -. agregó el pequeño algo sonrojado.
- Harán sonrojar a su madre. -. grito la pelirrosa desde la cocina riendo.
- Oh, Sakura. Ni lo digas. -. respondió Sasuke riendo también.
- Mi mamá es muy linda. -. asintió la pequeña sentándose al lado de su padre.
- Lo es, cariño, lo es. -. respondió el pelinegro revolviendo el cabello de la pequeña.
- Oye, papá...
- Dime.
- ¿Por qué dejaste de ser doctor?
- Hmp, supongo que esa carrera no era para mí.
- Pero el abuelo dice que...
- ¿Quieren que les cuente una historia?
- ¿Historia?
- Si, de cómo fue que deje de estudiar medicina.
- ¡Si!
- Pues bien, escuchenme atentamente: Hace muchos años, su padre, mejor dicho yo. Tenía muchos problemas con su hermano mayor, él estaba celoso y quería que su padre lo reconociera de la manera que sea.
- ¿Hablas del abuelo Fugaku?
- Si, de él. ¿Me dejan continuar?
- Hai.
- Entonces decidí estudiar medicina y ser un gran doctor, lo que siempre quiso ser su abuelo Fugaku. Entré a la carrera de medicina, y conseguí poner orgulloso a mi padre.
- Pero si ya lo habías logrado, ¿por qué lo dejaste, papá?
- Daichi, cállate y deja que papá continúe con la historia.
- Hmp...-. el pelinegro trato de poner un gesto serio pero terminó riéndose. - jajaja gracias, Hana.
- Hmp, mejor sigue con la historia papá...
- Esta bien. ¿En que me quede? Ah si, pero un día conoció a una chica, una chica que cambiaría mi vida. Esa chica siempre andaba con una ropa extraña, pero siempre sonreia, todos aplaudían su paciencia, parecía un ángel.
- Papá, mamá se pondrá celosa. -. susurro Hana.
- Jajaja ¿tú crees?
- Sip.
- Sakura, ¿tú crees? -. pregunto el pelinegro mirando hacia la cocina.
- Jajaja quizás un poco. -. respondió la pelirrosa mirando la puerta de la habitacion.
- Entonces mejor sigo, ella siempre estaba detrás de los profesores, se esforzaba en la carrera, se pasaba horas en la biblioteca estudiando.
Y yo lo único que buscaba era sacarla de mi camino y ser el mejor para que mi padre se sienta orgulloso de mi.
Pero por más que hacía el esfuerzo, ella siempre ganaba.
Un dia me enfrente a ella y le dije si estaba compitiendo conmigo o algo, pero ella...ella ni me conocia.
- ¿No te conocia?
- No, a pesar de estudiar juntos, ella solo estaba metida en las clases. En ese momento me di cuenta que yo competía con esa chica pero ella no competía conmigo...-. respondió sin dejarde sonreír.
- Papá, ¿por qué te quedaste callado?
- No es nada, solo recordé algo.
- ¿Qué? ¿qué?
- Un día ella me pregunto si de verdad me gustaba esa carrera. Al principio me moleste con ella pero luego lo entendí, yo no tenía ese brillo cuando estábamos en las prácticas, yo no tenía esa pasión por la medicina.
- ¿Entonces que pasó?
- Pues paso que me di cuenta que debía hacer lo que a mi me gustara, cumplir mi sueño no el sueño de otra persona. Supe en ese momento que quería ver a mi padre orgulloso pero con logros mios, no con lo que él no pudo hacer.
Así que me salí de medicina y estudie para ser un gran policía.
- Y, ¿te gusta mucho ser policía, papá?-. pregunto la pequeña pelinegra haciéndolo sonreír.
- Si, me gusta mucho.
- Yo cuando sea grande seré un gran policía como tú, papá. -. respondió orgulloso el pequeño pelinegro.
- Claro que lo serás, cariño. -. agregó Sakura tomando sus cosas.
- ¿Ya te vas? -. pregunto Sasuke mirando a la habitación.
- Si, Naruto ya está esperandome abajo. Hinata esta dormida, y hay comida en la nevera.
- Gracias por venir a cuidar a los pequeños, Sakura. -. respondió Sasuke poniéndose de pie.
- No es nada, el médico le dijo que debía guardar un poco de reposo por su embarazo y yo encantada de venir a cuidarlos. Ademas se lo debo, por la entrevista que dio en mi programa...
- ¡Oí, teme! Ya deberías cerrar la fábrica, pobre Hinata-chan. -. grito un joven rubio con un pequeño niño en los brazos.
- Hmp, dobe, ¿cómo entraste? -. pregunto Sasuke enarcando una ceja.
- Jajaja ay Naruto, mejor cállate antes de que Sasuke te mate. -. susurro Sakura nerviosa empujando a Naruto hacia la puerta.
- Pero...-. iba a protestar pero decidió hacer caso. -. Vale, mejor hago caso. Los golpes de Sakura-chan duelen más que las del teme. Adiós, niños.
- Mejor vamos. Nos vemos Sasuke, niños.
- Adiós, tía Sakura, tío Naruto.
- Ese dobe. -. suspiro Sasuke tocándose la cabeza.
- Papá...-. susurro la pequeña llamando la atención del pelinegro.
- ¿Si?
- Y, ¿qué pasó con esa chica? ¿se hizo una buena doctora? -. pregunto sonriendo, Sasuke observo sus ojos color luna y asintió.
- Bueno, su madre es la mejor doctora del país...
