↝Nosotras↜ Jenlisa Fanfiction

↝La nueva↜

  Caminaba por los pasillos vacíos de la prestigiosa preparatoria a la que asistía, la mayoría de los alumnos estaban en clase y me gustaba saltarme algunos turnos para poder merodear por la escuela libremente. No había monitores en los pasillos, sólo cámaras de las cuáles nadie revisaba las cintas así que no me preocupaba ser atrapada por alguna de las autoridades escolares y en todo caso, siempre llevaba el "pase de baño" que le había robado a mi profesor de Literatura sin que se diese cuenta ya meses atrás. La suela de mis zapatos de goma rechinaba por todo el estrecho pasillo al compás del chasquido de mis dedos, solía cantar canciones en mi mente cada vez que caminaba sola, todos los días tenía una nueva para cantar. Ese día había decidido ir por un clásico, "Lovin' you" de Minnie Riperton. No me solían gustar las canciones tan románticas, las encontraba muy empalagosas pero hoy tenía la extraña urgencia de reproducir esa canción constantemente en mi cabeza.

  Estaba unos cuántos metros alejada de la oficina del director cuando pude ver a la lejanía como un gran grupo de personas salían de ella, tanto dirigentes de la escuela como una familia que parecía provenir de otro lado. No pude anteponerme a mi curiosidad pero tampoco podía dejar que me vieran, así que me escondí a un lado de los casilleros esperando no ser vista. El tumulto de gente pasó a mi lado sin reparar en mi presencia excepto por la chica, que deducía que tenía más o menos mi edad, que pareció notar mi mirada y se dio vuelta para enfrentarme. Fue un instante en el que nuestros ojos chocaron y creo que jamás había visto unos orbes tan juguetones y hermosos en toda mi vida, ni siquiera los de mi novio Kai podían compararse con los de ella. Pero tan rápido como inició el contacto entre nosotras, tan rápido lo terminó. Al parecer la chica no había sentido la misma descarga eléctrica que yo cuando nos vimos.

  Debo admitir que era hermosa, demasiado hermosa. La mismísima Afrodita podría estar celosa de su belleza, estaba más que segura que todos voltearían a mirarla más de una vez. Parecía una muñeca Barbie pero mucho más adorable y juguetona. No me consideraba una persona estrictamente heterosexual pero tampoco podía considerarme bisexual o gay, me gustaba admirar la belleza de ambos géneros por igual pero siempre me sentí mucho más atraída por los hombres que por las mujeres.

  Y como a una persona que sabe reconocer la belleza cuando la ve, debo decir que esa chica parecía ser la maldita perfección en persona.

  No sabía cuanto tiempo con exactitud sólo me quedé pensando en ella y sus ojos color ámbar, pero supe que fue mucho cuando mi bolsillo trasero empezó a vibrar. Era una llamada de Rosé, quien siempre verificaba que no me vaya por demasiado tiempo de una clase.

  Rosé era mi mejor amiga, alguien extremadamente tierna pero intimidante si se lo propone. Parece un ángel pero tiene un carácter del demonio, sobretodo cuando se saltea una de sus comidas. No soy una persona social, no me gusta interactuar con las personas y pasar por todo el proceso de conocerse, así que no era tan fácil llegar a mí. Chaeyoung y yo nos hicimos amigas el día que peleamos por una cuerda para saltar cuando íbamos aún a la primaria, ninguna de las dos quería ceder y su carácter desafiante y fuerte me gustó, desde entonces somos inseparables.

—Jennie ya pasaron más de veinte minutos, mueve tu trasero hasta el salón de clase ahora mismo—Me dijo mientras gritaba susurrando, probablemente porque ella estaba en clase y no podía ser descubierta usando el móvil durante la lección.

—Relájate Park, tuve un pequeño percance—Expliqué—. Ya voy.

  Un pequeño percance muy lindo y encantador.

—Más te vale idiota—Masculló antes de colgar.

  Estaba indignada más no sorprendida, era típico comportamiento de Rosé pero había sido más precavida que veces anteriores, hoy llevaba un paquete de gomitas en mi mochila para poder domar a la bestia y salvarme de un fuerte regaño. A veces dudaba quién era la mayor entre nos, si ella o yo.