My only reason {Luke Hemmings} ||PAUSADA||

Capitulo 3

Me giré y miré el despertador.

-¡NONONO POR FAVOR! -eran las 7:55. Tenia 5 minutos para arreglarme y llegar al instituto o llegaría tarde mi primer día.

Me puse en pie de un salto, fui a mi armario y me puse unos vaqueros rotos, una sudadera varias tallas mas grande que yo y unas converse negras. Me lavé los dientes y me peine lo más rápida que pude, cogí mi mochila y bajé las escaleras corriendo.

-¡Me voy al instituto! -grité abriendo la puerta.

-¿No desayunas? -me preguntó mi tío desde la cocina.

-No, llego tarde.

-¿Te llevo?

-¡Si, por favor! -le rogué. Estaba demasiado nerviosa, no quería llegar tarde mi primer día.

-Venga, vamos. -dijo levantándose. Luca hizo lo mismo. Salimos y monté en el asiento de copiloto, mi tío conducía y mi hermano detrás. A los cinco minutos llegamos.

-Gracias por traerme -le dije a mi tío mientras bajaba del coche y cerraba la puerta.

-¡Suerte! -me gritó asomándose por la ventana y despidiéndose con la mano.

Entré corriendo y fui a la clase que me tocaba, aula 8. En los pasillos no había nadie y estaba todo en silencio, eso significaba que ya estaban todos en clase. Fui corriendo a la última aula que había en la parte derecha. Cuando llegué, me peine el pelo con las manos ya que lo tenía todo alborotado. Vamos Elena, tu puedes me dije en voz baja. Toque la puerta dos veces y abrí. Todos me miraron, algunos decían cosas en voz baja y se reían, no había que ser muy listo para saber que era de mi, y luego habían otros que ni miraron.

-Buenos días, ¿puedo ayudarte en algo? -dijo el profesor que estaba dando la clase. Era bajito, moreno y tendría unos 40 años.

-Me llamo Elena Crawford, soy nueva, me dijeron que tenía que venir a esta clase, se me hizo tarde, lo siento. -dije tan bajo que apenas yo podía oírme, suerte que el profesor si.

-No te preocupes, puedes sentarte... -miró los asientos de la clase, todos estaban ocupados, excepto uno.- ahí -dijo señalando a la última fila. 

Fui con la cabeza agachada a donde el me dijo y me senté. Al lado mía estaba una chica, tenia el pelo negro, los ojos verdes y la piel muy blanca, la verdad es que era muy guapa.

-¡Hola! Me llamo Sara -dijo sonriendo.

-Yo Elena, encantada.

-¿Eres nueva?

-Sí -le respondí sacando los libros

-Si quieres cuando acabe la clase puedo enseñarte el centro, la gente... Y los chicos -me dijo guiñándome un ojo.

-Claro -le dije soltando una risa por su comportamiento.

Tenía el presentimiento de que esa chica me iba a caer muy bien.