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01- When we met
Raeyim caminaba en aquella colorida calle, recorriendo sola y viendo en qué restaurante podría comer ya que había salido bastante tarde de su trabajo y su cuerpo le exigía comida casera, ya estaba completamente cansada de las comidas congeladas y de los fideos instantáneos que era lo único que podía comer en días atareados; pero estaba al fin desocupada y al apenas salir de aquel enorme escritorio se dirigió a Itaewon.
Arregló su falda correctamente y al detenerse bruscamente en frente de un restaurante de colores amarillos neón sintió un duro golpe en su hombro, sobándoselo con rapidez y observó a un moreno completamente alto junto a varios chicos más, Raeyim pensaba que si no fuera por aquella cara que demostraba miedo y preocupación se hubiera sentido intimidada, por lo que solo le dedicó una pequeña mueca y este se acercó un poco más para ver cómo se encontraba.
—lo lamento demasiado, no me estaba dando cuenta del camino, perdón— se disculpaba rápidamente preocupado y Raeyim negó.
—está bien, me detuve a buscar algún local para comer de la nada.
Él rascó su nuca avergonzado sin saber qué hacer ante aquella situación incómoda, la chica le hizo una pequeña reverencia para adentrarse en aquel local, dejando al chico alto menos preocupado y camino junto a sus demás amigos intrigado, se había preocupado por aquella chica ya que un golpe así de suave le hubiera dolido de tal manera, pero solo alejó esos pensamientos para empujar a sus amigos, la chica fue hasta una mesa cerca de la ventana y así para poder pedir bastante comida.
Observando a aquel alto chico bromeando junto a sus amigos en el local de al frente y por un momento pudo sentir como sus miradas se juntaban, pero solo volvió su vista al mesero que llamaba su atención para poder pedir, pidió rápidamente volver su vista hacia afuera, vio a sus amigos pero a él por lo que solo soltó un pequeño suspiro y observó una botella de soju frente a ella y al subir la mirada observó de nuevo a aquel chico frente a ella; Raeyim sintió su cuerpo vibrar de la emoción al volver a encontrarse con el moreno de cabello oscuro.
—¿estás sola?— preguntó un poco nervioso, pero la chica asintió— ¿puedo sentarme?
La chica volvió a asentir y miró sus manos por debajo de la mesa, debía admitir que estaba completamente nerviosa ante la presencia del chico sentado en aquella mesa; por unos momentos pensó que él era muchísimo menor que ella.
—Me llamo Raeyim y tengo veintiún años por si te lo preguntas —rió un poco nerviosa intentando eliminar aquel silencio incómodo que se había creado.
—Yo me llamo Mingyu y tengo veintitrés —sonrió ya sintiéndose más calmado y pidió comida para él— quería disculparme contigo por lo de hace un rato, a pesar de que fuera un golpe leve al parecer te dolió bastante así que no pude evitar preocuparme.
Raeyim se sonrojó un poco al escucharlo y abrió la botella de Soju para servirlo en aquellos pequeños vasos.
—la verdad no he estado comiendo bien, así que en ese aspecto estoy muy débil, lamento haberte preocupado.
Mingyu le dio un rápido sorbo a aquel vaso de soju, pero no pudo evitar hacer pequeñas caras ante lo amargo que era, pero sabía que debía acostumbrarse y Raeyim lo siguió, también haciendo caras junto a él y llegando la comida, aquella cena había sido bastante divertida y la chica pensaba en lo agradable que era Mingyu con ella, lo cual estaba completamente agradecida; el mayor decidió pagar la cuenta en forma de disculpa y decidió acompañarla a su pequeño departamento, avisándole a sus amigos que se iría a casa.
Mingyu y Raeyim se quedaron afuera de aquel departamento sin saber qué decir, pero la menor fue más rápida y le entregó su teléfono lo cual el mayor solo la quedó observando intrigado.
—espero que salgamos más seguido, la pase bastante bien contigo. —Mingyu le entregó su celular para que también anotara su número de teléfono en él.
Pero ambos estaban sonando en sus respectivas manos, Raeyim notó la foto que Mingyu tenía con una chica en el que salía "Yoona💘" y él contrario solo observó aquella foto que tenía con un chico de cabello negro al cual tenía como "Subin💕", ambos mantuvieron un silencio incómodo.
—debo irme, de seguro los chicos le avisaron a mi novia que ya iba a casa —ambos la habían pasado tan bien que se les había olvidado que habían otras personas en sus vidas. —y creo que tu novio también te espera.
Raeyim asintió bastante apenada ante la situación, dándole un pequeño abrazo.
—espero que nos veamos pronto Mingyu.
La chica le dejó un pequeño beso en su mejilla en forma de despedida mientras que él solo la observó entrar, maldiciendo ante lo ocurrido y solo decidió irse a llorar a la casa de sus amigos, no quería ver en ese momento a su novia.
