La venganza de Vader

Explosión

El gran Moff Tarkin no creía lo que aquel contrabandista había dicho, pero si tenía que tener cuidado con algún jedi que quisiera tomar replesalias contra ellos en nombre de Anakin Skywalker.

Sospechaba de uno, uno que había desaparecido de las manos del gran inquisidor, salvado por Ahsoka Tano. Obi- Wan Kenobi, él había sido arrestado, y luego había desaparecido.

Sin importar las ordenes del emperador, él tomaría precauciones, ordenó buscar a Obi- Wan Kenobi por toda la ciudad imperial, debían encontrarlo, a él y a la muchacha. Ellos dos eran los únicos que podrían querer vengar la muerte de Skywalker. Porque los muertos jamás volvían de la tumba. Ni siquiera los jedi.

La búsqueda de Obi- Wan Kenobi se extendió por todo Coruscant, y Ahsoka se encargó de esconderlo bien. 

- Vete Ahsoka- dijo Obi- Wan que estaba mejorando lentamente- Es a mí a quién buscan

- ¿Pero por qué? ¿Por qué organizar una búsqueda de ese nivel solo por ti?- preguntó Ahsoka con curiosidad

- No lo sé, pero realmente, debes dejarme, estaré bien Ahsoka- dijo Obi- Wan aunque Ahsoka sabía que eso no era verdad.

- Maestro Obi- Wan- preguntó Ahsoka que parecía perdida en sus pensamientos

- ¿Qué ocurre Ahsoka?- preguntó el maestro jedi

- ¿Los muertos pueden volver desde la muerte? ¿La fuerza puede hacer eso?- preguntó Ahsoka y Obi- Wan la vio como si fuera una niña nuevamente.

- ¿Por qué preguntas eso?- preguntó Obi-Wan confundido

- Debemos salir de aquí- dijo Rex que por fin había encontrado a Ahsoka

- Es a mí a quién buscas, déjala a ella- dijo Obi- Wan intentando proteger a Ahsoka

- Tranquilo, él nos ayudó a escapar la última vez ¿No?- preguntó Ahsoka con una sonrisa

- No sé de que hablas mintió Rex, solo dense prisa- dijo Rex y Ahsoka asintió. 

Cualquier lugar sería mejor que ese, pero ella tenía algo que hacer luego de esconder a Obi- Wan en otro lugar, debía aclarar su duda, respecto al extraño hombre que la salvó aquel día. Era imposible que la que pensaba fuera cierto, él había muerto y ella lo visitaba siempre que podía en su tumba.

Vader observaba a través de la fuerza cada uno de los movimientos de Tarkin, él buscaba a su maestro, Obi- Wan Kenobi. No permitiría que llegaran a él. Tampoco permitiría que llegaran a Ahsoka. Rex lo ayudaría a eso, aunque él aún no recuperara su memoria.

Cuando Rex dejó a Obi- Wan en un lugar seguro, observó a Ahsoka salir de allí. Él también decidió salir de allí, y casi murió del susto al ver a alguien que debería estar muerto, de pie frente a él.

- ¿Algún día dejarás de aparecer así?- preguntó

- Necesito que crees una explosión, que piensen que Obi- Wan está allí- dijo Vader y Rex suspiró

- ¿Por qué piensas que haré algo así?- preguntó Rex pero Vader ya no estaba.

Rex se maldijo cada minuto cuando caminaba a crear la explosión, y extrañas imágenes aparecían en su mente, imágenes de un pasado, Ahsoka ¿Y Anakin Skywalker? ¿Por qué los recordaba a ellos? Nada tenía sentido, ni siquiera él que siendo un soldado imperial, se dirigiera a crear una explosión para esconder a un jedi, solo porque un muerto se lo había pedido. Tal vez necesitaba una revisión en Kamino. 

Luego de la explosión, todos los ejércitos se dirigieron hacia allá, el mismo Tarkin tomó su nave y comenzó a conducir hacia allá. Para que Tarkin tomara una nave de batalla por si mismo, debía ocurrir algo realmente malo. pero Tarkin comprobó que si ocurría algo malo cuando un sable de luz de color carmesí estuvo cerca de su cuello mientras estaba en su nave.

- ¿Quién eres tú? preguntó en completa calma

- Conduce- indicó Vader observándolo a los ojos

- Esto es imposible- dijo Tarkin - Tú estás muerto, yo, ellos te mataron

- ¿Sorprendido?- preguntó Vader- Vamos conduce

- ¿Cómo es posible?- preguntó intentando aparentar calma, una que no tenía en esos minutos.

- Conduce- repitió Vader el sable de luz cada vez más cerca de su rostro

Tarkin lo hizo. ¿Era posible lo que veía? ¿Él no había muerto realmente? No era imposible el emperador había pedido ver su cuerpo sin vida, él estaba muerto.

- Más rápido- dijo Vader y Tarkin comenzó a sentir que su corazón se aceleraba.

Finalmente la nave de Tarkin iba a toda velocidad, el hombre sabía que podía chocar en cualquier minuto, contra nave de los que lo miraban extrañados, contra un edificio, en alguna curva, en alguna parte. Pero esas nos eran las intenciones de Vader. 

- Para allí- dijo Vader indicando un edificio en la planta más alta y él paro allí. Si pudiera alcanzar su arma, podría escapar, pero Vader sonrió dejándolo empuñar el blaster.

Tarkin disparó no una sino muchas veces al cuerpo de Vader, y él sonrió con suficiencia al ver verdadero terror en el rostro del gran Moff Tarkin.

Vader usó la fuerza para inmovilizarlo y lo obligó a sentarse nuevamente, el hombre no comprendía que ocurría hasta que vio a Vader sacar unas esposas y atarlo firmemente a la nave y luego arrojarlas fuera de la nave. 

- ¿Qué pretendes hacer?- dijo Tarkin con miedo en su voz, pero no quería demostrarlo, su orgullo era más fuerte.

- Le daré al emperador la pirotecnia que necesita en el aniversario del imperio- dijo Vader y Tarkin comprendió, Vader ingresaría las coordenadas y lo haría estrellarse contra la nave de control de Coruscant. Pero era imposible, moriría antes de llegar ninguna nave podría sortear todo y estrellarse con la nave de control desde allí.

- No lo lograrás- dijo Tarkin y Vader sonrió al ver que comenzaba a temblar al conocer su destino.

- Lo haré- dijo Vader, era un excelente piloto sabía ingresar las coordenadas para que la nave llegara sola allí.

Terminó de atar a Tarkin pero antes de enviarlo, lo torturó usando la fuerza, cuando sus gritos le parecieron suficiente, lo hizo de nuevo, solo para vengar una y otra vez a Padme. El hombre estaba sin fuerza recostado sobre el asiento de la nave aún con miedo a su destino.

- Yo no necesitaré asegurarme de que estás muerto- dijo Vader y salió del lugar justo cuando la nave partió.

Sintió los gritos de Tarkin nuevamente, y luego lo vio desaparecer de la atmósfera y una gigantesca explosión sucedió en la nave de control, luego todas las luces de Coruscant se apagaron y algunas inmediatamente se encendieron. Sin la nave de control, Coruscant solo tenía comunicación táctica, él había eliminado sus comunicadores y comunicaciones a distancia. 

La precisión de las coordenadas era de una en une millón y solo alguien tan hábil como él podría haberlo logrado.

El emperador se enteró inmediatamente de la muerte de Tarkin, solo porque encontraron su nave en medio de la explosión, y supo que los rumores eran verdad, Anakin Skywalker había vuelto. No se pregunto el como, pero él había vuelto por él y el emperador sabía que Anakin, era el único que podía hacerle frente sin esfuerzo. Comenzó a temer que sus días estaban contados, debía detenerlo de alguna manera.