Mi Pequeña Esmeralda

Capítulo 1

En una tranquila y fresca noche de noviembre Albus Dumbledore llevaba en una pequeña canasta a un lindo bebé de peculiares ojos verdes mientras a pasos ligeros se acercaba a su destino, la casa de la familia Dursley. Este era el primer paso de su elaborado plan, uno que estaba planeado desde hace muchísimo tiempo, era la última fase y era cuestión de suerte para que llegar a su meta.

En unos años nos volveremos a ver mi muchacho y cuando nos volvamos a ver estarás tan necesitado de cariño, que caerás fácilmente, por favor no crezcas bien, no te cuides- 

El pequeño bebé solo veía lo que se encontraba detrás de la persona que lo llevaba, la luna llena es tan bella, tanto que había hipnotizado por completo al bebé. Dumbledore dejó la canasta frente a la puerta de los Dursley, dejó una nota junto al bebé y llamó a la puerta entes de desaparecer. El bebé soltó una pequeña risa al poder observar a la luna por completo.

Una persona abrió la puerta, era una mujer que al parecer era la jefa de familia, observó a su alrededor y finalmente vio hasta a bajo y vio a un bebé con los ojos verdes. Se fijó en la nota que estaba con el bebé.

Tu sobrino Harry Potter nació el 31 de julio, Lily Evans  junto a su esposo James Potter fueron asesinados, cuídalo por favor.

No, yo no podré cuidar de este niño, él era responsabilidad de mi hermana, tal vez él también es un fenómeno igual que ella, no estoy dispuesta a cuidarlo - susurró la mujer.

Yo no voy a poder cuídate pequeño, demás Vernon también te odiaría, serías un estorbo en esta familia- 
Tomó la canasta con Harry y aprovechando que su esposo y su hijo habían ido a comprar algo para cenar, se metió en el auto y marchó al orfanato más lejano de su casa.

Al llegar al orfanato dejo la canasta en el suelo frente a la puerta del orfanato, le puso una nota, tocó la puerta y se fue.

La señora Marie fue quien abrió la puerta y vio a un pequeño bebé

 Cómo alguien pudo haberte abandonado? eres un hermoso ángel!- dijo la señora Marie mientras tomaba al pequeño en la canasta. Lo llevo a dentro donde estaban las demás trabajadoras.

Quién es este hermoso bebé?- preguntó una de ellas

No lo sé, recién lo acabo de encontrar afuera, al parecer lo abandonaron-

Mira la canasta tiene una nota!- dijo otra trabajadora

Marie tomo la la nota y decía:
Harrison -31 de julio

Se llama Harrison, al parecer nació el 31 de julio pero no tiene un apellido-

Tendremos que ponerle uno, no puede quedarse así-

Que les parece Moon? La luna de hoy es tan linda como él-

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Con el trascurso del tiempo las cuidadoras y los huérfanos fueron notando que Harrison no era el ángel que alguna vez pensaron, sabían que el niño no era normal.

A la edad de 6 años Harrison era acosado y golpeado por los huérfanos mayores a él, ellos  pensaban que él era un "fenómeno".
Las cuidadoras fingían no darse cuenta de ello pues ellas también pensaban lo mismo.

Harrison tuvo que a aprender a defenderse y a cuidarse, él sabía que no era normal, él no era ordinario, no era como esas personas. Sabía que él era especial.

Harrison era un niño al que le encantaba leer, le gustaba aprender, empezó a estudiar en una escuela a sus 6 años, los profesores quedaban fascinados con la inteligencia que tiene el niño a tan temprana edad. Era un niño solitario, serio, con una mirada que enfriaban el verde de sus ojos. Solía fingir  inocencia ante sus profesores cuando le hacía algo a otro niño,  en el orfanato no lo hacía porque las cuidadoras no le creían aunque el estuviera diciendo la verdad.

Cada vez que se enojaba podía hacer cosas con solo pensarlo, una vez un niño mayor que él le había estropeado el trabajo de jardinería que había estado haciendo, el se enojo tanto que pensó: ojalá que se te rompan los huesos de tus piernas, segundos después se escuchó el desgarrador grito de aquel niño.

Harrison sabía que el tenía algo, pero no sabía que, pero él aprendió a controlarlo a moldearlo a su manera, para poder defenderse de esos niños que siempre lo molestaban.

Un día mientras realizaba sus actividades de jardinería en su pequeño espacio de tréboles como de costumbre, escuchó cómo alguien maldecía.

Malditos humanos, ni siquiera me había acercado a ellos y ya me estaban atacando por idiotas los mordí, tendrán una muerte lenta y dolorosa- 

Él se dirigió hacía donde provenía esa voz y se encontró con una hermosa serpiente color verde con tonalidades de azul, a sus ojos era simplemente bella.

Tú también vienes a molestar maldito humano?- preguntó la serpiente

No, para nada pequeña, solo venía a ver quién era la persona que estaba hablando, pero me encontré contigo-

Ohh un hablante parsel, pensé que el último había muerto-

Un hablante de parsel? Que es eso?-

Los hablantes de parsel, son magos descendientes de Salazar Slytherin, es la habilidad de hablar con las serpientes-

Disculpa? Magos?-

Así es, pequeña cría, existen los magos y tú eres uno -

Tienes un nombre?-

Me llamo Shesha -

Un gusto Shesha yo soy Harrison-

Ese día Shesha le explicó a Harrison todo sobre la comunidad mágica, no durmieron mucho esa noche, le explicó todo sobre su magia y lo que podía hacer.

Harrison por varios días estuvo practicando aún más con su magia, estaba feliz de saber que era un ser excepcional y no era como esas personas, ahora el sabía que no era el único de su especie y que a demás había toda una comunidad mágica.