Víctor

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Hoy como todos, es un día muy estresante, comencemos con que el nuevo jefe contrató a muchas personas sin experiencia que sólo hacen que las personas que si sabemos que hacer tengamos más trabajo, estoy es agobiante.

-Hola, Víctor, te ves cansado, ¿dormiste anoche?

-Si.

-No tienes que ser tan cortante.

-Charlie, sólo déjame trabajar.

-Hombre, necesitas descansar primero, te ves demacrado.

-Así se ve todos los días -irrumpió Sharon.

-Gracias.

-No te preocupes, y Charlie, no terminaste tu trabajo de ayer, así que en vez de platicar deberías de terminarlo, se te están acumulando las cosas.

Ambos se van y por fin puedo sentarme en mi escritorio con algo de tranquilidad...

-¡Jonathan!

-Ya te dije que me llamo Víctor.

-Perdón, oye, ¿me podrías ayudar con esto?, es que no lo entiendo muy bien.

Ella es Mayura, una de los nuevos empleados que como la mayoría, está aquí por su físico en vez de su intelecto.

-¿Ahora de qué se trata?

Deja en mi escritorio todo el trabajo que tiene que hacer.

-Mira, no aré nada de eso, te lo explico, pero eso será todo.

-Muchas gracias Víctor, eres demasiado lindo y considerado, aunque hubiera sido más fácil que tú lo hicieras, puedo ayudarte para que no te estreses, sé hacer buenos masajes.

-No creo que te contrataran para que desestresen a los demás empleados.

De muy mala gana trato de explicarle de la manera más clara para que entienda y se pueda ir, pero parece no prestarme atención.

-Bien, eso es todo, adiós.

-Si pero...

-Dije adiós.

Por fin puedo trabajar en paz, ella es la única persona con la que e batallado de esa manera y en verdad que exaspera demasiado, sólo quiero irme a casa y dormir.

Durante el descanso me sentí más estresado de lo que debería y es que la conversación fue así:

-Víctor, ¿sigues con la gorda esa?

-Más respeto, ella es una buena chica.

-Está gorda.

-Su personalidad es más importante.

-Claro que no, si no está buena no te sirve de nada, digo ¿qué piensas presumir?, ¿que es buena persona?

- ¡Ya basta!, no permitiré que hables así de ella, claro que la personalidad es más importante que e físico y para tu información ella es muy hermosa, es sólo que tus profanos ojos no pueden distinguir la belleza de diferentes formas porque tu cerebro sin evolucionar no puede procesar tanta información y por eso tus niveles de cognición y apreciación del mundo que te rodea son tan limitados -suspiro de frustración.

Sólo quiero ver a Rose, a pesar de lucir a veces como una niña realmente me tranquiliza estar con ella, sería lindo pensar en pequeñas Roses o mejor pequeños Roses, eso si que tranquiliza, sólo espero que ella cambie pronto su actitud y personalidad, que todo el tiempo quiere comer, dormir, jugar, es demasiado inmadura para ser madre, tendré que ser más firme con ella.

Al llegar al departamento noto que Rose no hizo nada, al menos preparó la cena, aunque se ve un tanto desagradable.

-Hola, cariño, que bueno que llegaste.

- ¿Por qué no hiciste nada?

-Pues mira, aprovechando de que todo ya estaba limpio salí a buscar empleo, aún no encuentro nada, pero envíe unas solicitudes...

-No, tú no vas a buscar ningún empleo, te quedarás en el departamento a limpiar y cocinar.

-No quiero.

- ¿Y quién lo va a hacer?, antes de que te despidieran este lugar era un desastre, te quedarás aquí y punto.

-Podemos conseguir una sirvienta.

-No quiero, además ya que no estás tan ocupada debería de ser tiempo ya de pensar en tener hijos.

-No, mira, yo no me siento preparada para tener hijos, además, no me agradan los bebés, lo único que saben hacer es cagar y llorar.

-Yo quiero dejar descendencia.

-Y se puede hacer de otras maneras, como por ejemplo adoptar.

-Quiero que sea mío, y ya está decidido, la próxima semana nos informaremos de todo lo que un bebé necesita y en un mes comenzaremos a intentar tener uno.

Me voy muy molesto a la cama sin casi haber tocado la cena. La verdad siento que me excedí con ella, mañana que esto pase me disculparé.

La travesía de RoseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora