≠No es un adiós≠

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–¿Cómo que te vas?– Poppy intentaba no llorar pero no le resulto, unas pequeñas lágrimas salian de sus ojos color rosa, ella tenía ya 11 años y estaba teniendo un excelente día, hasta que llego a la casa de la señora Rosi, ahí pudo ver un pequeño camión de mudanza y a unos señores subiendo muchas cosas en él

–Mi padre me consiguió un lugar en la secundaria de Pueblo Berteno– un Ramón de 12 años empezaba a empacar su ropa y el resto de sus cosas en su cara se reflejaba el fastidio que sentía al estar empacando

–Pero yo no quiero que te vallas– Poppy lo abrazo muy fuerte y empezó a llorar, Ramón también la abrazo

–Yo tampoco me quiero ir, pero mi papá quiere que valla con el para pasar tiempo juntos y cosas asi– le dijo Ramón sin muchos ánimos

–Pero eso significa que ya no te veré más y que ya no podremos jugar juntos– Ramón veía con indiferencia a la niña que no paraba de llorar, pero en sus ojos se notaba lo mucho que le dolía verla llorar así que solo la abrazo más fuerte y empezó a acariciar su pelo con cariño

Despues se separo de ella lentamente y se acerco a su armario, de ahí saco una caja color rosa con un moño blanco

–Ten, abrelo cuando estes sola

–¿qué es esto?– pregunto recibiendo su regalo, quizo abrirlo pero Ramón la detuvo

–Abrelo cuando estes sola– Ramón le dedicó una tierna sonrisa y eso hizo que Poppy asintiera y guardara la caja en su mochila

–¡Ramón ya esta todo listo!– le grito la abuela Rosi a su nieto y Poppy se volvio a entristecer

–Oye– le llamo Ramón y ella levanto la mirada –esto no es un adiós, es un 'hasta pronto'– Ramón intento animarla y ella sonrió tiernamente –Te prometo que volveré

–De acuerdo– dijo ya con un animo mejorado –Pero aún así, te voy a extrañar

–Yo también te extrañare, princesa Poppy– dijo en tono burlón

–No me llames así– Poppy hizo un puchero

–Tu padre me dijo "ella es una princesa, así que debe ser tratada como tal"– dijo haciendo la voz gruesa intentando imitar al señor Pepe

–Pero no se vale

–Tu me dices gruñón y yo no te digo nada

–Pero si eres un gruñón– Poppy sonrió

–Y tu la princesita de papá– le dijo en tono burlón

–Ramón, es hora de irnos– le llamo su papá

–Ya me voy– le dijo Ramón pero antes de acabar su frase Poppy lo abrazo con mucha fuerza

–Te quiero Ramón– le dijo escondida en su pecho, Ramón sonrio y la abrazo también

–Yo tambien te quiero Pops– le dijo tiernamente para luego separarse de ella

Ramón bajo sus cosas y las subio al carro de su papá, despues el se subio al asiento del copiloto y por la ventana vio a Poppy y al Snack Pack tristes.
El les dedico una sonrisa y con su mano se despidió haciendo que todos hicieran lo mismo

Mi Niña (Trolls)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora