1. Niñera

641 38 9
                                    

Viernes Por la Noche

Ramón conducía devuelta a su casa, eran ya las 9 de la noche y estaba algo cansado.
El trabajaba en una tienda de deportes y por lo regular el salía a las 6 del trabajo, pero una pequeña reunión lo tuvo 3 horas más en ese lugar, lo peor de todo era que ahora tendría que soportar los reclamos de la persona que más amaba en este mundo, esa mujer que lo sacaba de quicio y que seguramente estaría enojado con él por no llegar a tiempo

Al llegar, solo saco sus llaves y abrió la puerta, y cuando entro se topo con una joven de aproximadamente 22 años, de pelo rosa y ondulado, ojos del mismo color de su cabello, vestía con un hermoso vestido azul, una diadema con flores azules adornaba su cabello que traía suelto y una enorme sonrisa estaba adornando su rostro

–Buenas noches señor Ramón– le dijo ella

–Buenas noches Poppy, ¿Dónde esta la bestia?– Poppy empezó a reír por lo comentado y señaló el sofá de la sala, ahí se encontraba una pequeña niña de 6 años que veía muy contenta las caricaturas en la TV

–Ya ceno, ya se cepillo sus dientes, su tarea la acabo hace horas y le di un baño– dijo Poppy

–Muchas gracias Poppy... Veras, solo tengo lo de las horas acordadas, mañana te pagaré lo que me falta lo prometo

–No se preocupe señor, yo entiendo y se que los improvistos pasan de un momento a otro

–Cada vez que me dices señor me siento viejo, solo te llevo un año...

–Sip, pero esa pequeña "Bestia" que esta sentada allá, hace que seas un "señor" y te guste o no, te tienes que acostumbrar

–Si, pero tu y yo somos amigos, así que no hay necesidad de que me digas así, se siente raro

Poppy empezó a reírse de él y eso hizo que la pequeña volteara a ver quien era él que estaba con su niñera

–¡Papi!– grito para ir corriendo a los brazos de Ramón quien la cargo y le dio un beso en la mejilla a su pequeña niña

–¿Te portaste bien, pequeño monstruo?– le pregunto sonriendo

–Si, obedecí a Poppy en todo lo que me dijo... Además hoy me trajo libros para leer– dijo la niña muy emocionada

–Eso es bueno bestia– le dijo Ramón –Ahora ve por un suéter que vamos a llevar a Poppy a su casa– la niña obedeció y corrio hacia su cuarto por un suéter

–No es necesario Ramón, puedo irme sola además....

–No Poppy, ya es de noche y es peligroso, no quiero que nada malo te pase– le dijo el con una sonrisa –¿Donde más puedo conseguir una niñera tan fabulosa como tu?– dijo con un tono de burla

–Jaja, bueno, podrías buscar una mujer, sentar cabeza y darle una figura materna a Iris– dijo ella haciendo que Ramón soltara un suspiro y se recargo en la pared –Se que a lo mejor tienes miedo

–No tengo miedo a volver a enamorarme... Solo que, Iris es mi prioridad y no quiero que nadie le haga daño y menos mi "pareja"

–Bueno, solo espero que decidas intentar algo con alguien, me gustaría verte feliz compartiendo con alguien– dijo y Iris bajo corriendo

–Ya papá– salieron de la casa de Ramón y subieron a su auto

El camino era silencioso, las calles estaban desoladas, perecía que los policías eran los únicos en las calles de Villa Pop y el silencio reinaba adentro del auto (parecía cuarentena, ok no xd)

–y, ¿Cómo estuvo el trabajo?– pregunto Poppy para hacer plática, pues tal vez así pasaría mas rápido el tiempo

–Bien, la verdad todo normal hasta que una señora de aproximadamente 60 años de edad compro un equipo para alpinismo, la verdad me sentí algo anticuado– dijo y Poppy se solto a reír –¿Y tu?, que hiciste antes de recoger a Iris en la escuela

–Bueno, me desperte a las 8 y de ahí hice mis compras, hice de comer, fui a comprar ropa y salí por Iris... La verdad no hice mucho

–Bueno, eso es mejor que estar limpiando vómito de un niño– dijo el sin mucho animo

Iris veía con mucha atención a su papá y a Poppy mientras hablaban de su día.
Después de platicar un rato llegaron a la casa de Poppy, los tres salieron del auto y la acompañaron a su puerta

–Bien, nos vemos el lunes Iris– le dijo agachándose para ver mejor a la pequeña

–Adiós señorita Poppy– le dijo Iris

–Hasta luego "Señor" Ramón– le dijo y el la miro con indiferencia

–Te odio– le dijo intentando ocultar una sonrisa –Descansa Poppy, vendré mañana para pagarte lo que te debo

–Hasta mañana entonces– Poppy entro a su casa y Ramón tomo a Iris de la mano para dirigirse de nuevo al coche

Mi Niña (Trolls)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora