//Midley - SoMo//
Austin, Texas.
La noche era fría, llena de emoción por el exitoso debut de su carrera. Ya no estaba cantando en bares, bodas o fiestas infantiles. Los gritos de los fanáticos llenaban de energía su cuerpo, ella se sentía inalcanzable, podría estar allí toda la noche. Finalmente había logrado sacar su primer álbum con una disquera importante, que le prometía hacerla exitosa, y ese era su primer concierto sobre un gran escenario y con audiencia que quería escucharla. El concierto más importante en su carrera, hasta ese momento. Había logrado lo que siempre soñó, ser una estrella. Y es que, ella había nacido para debutar, siempre lo supo.
La fiesta después del concierto fue una locura, su disco se había agotado en casi todas las tiendas de música, los boletos para su concierto era el debut del momento, y ahora estaba en discusión colaboraciones con otros artistas famosos, no solo del country alternativo. Su representante la felicitó, finalmente estaba cosechando todo el esfuerzo que había hecho. Se sentía en el clímax máximo: eufórica y cansada. Todos estaban pasando un buen momento, ebrios, bailando, disfrutando. La fiesta había sido propuesta por su muy reciente amigo en la industria, también era músico, compositor, cantante, incluso modelo y actor. Y eso solo eran unas cuantas cosas que él le había comentado. Era bastante famoso, su trayectoria en los medios se daba desde su niñez, así que era una cara conocida de muchas generaciones. En los últimos meses habían trabajado juntos en su álbum, hasta escribieron una canción juntos. Estaría en el segundo álbum, él prometió incluso cantarla con ella.
Y debía de admitirlo, aunque su noche fue fantástica, extrañaba no verlo con ella celebrando su triunfo. Él estaba en Los Ángeles, grabando una colaboración. Pero, eso no le limitó para sorprenderla con esta fiesta en su honor; Apolo siempre fue tan considerado con ella a pesar de solo estarse acostando juntos. Se suponía que solo sería una vez, pero desde hace unos meses ellos pasaron de unos halagos a sus trabajos a no poder pasar ni un solo día sin verse. Lo cual le afectaba ahora, lo extrañaba. Y no es que ella estuviera enamorada, ellos no eran nada oficial, solo era sexo casual. Todos en la industria tenían sexo casual con algún compañero.
No comprendía por qué pensaba en Apolo en ese momento, debía estar festejando y bebiendo hasta perder la conciencia. Vivir la noche que era joven. Olvidar que se puso ese vestido planteado de lentejuelas, con espalda baja, solo para que él le comentase algo sobre su fascinación por las pecas en su espalda. Se reprochó ese pensamiento, estaba haciendo justamente lo contrario. Y ahora que miraba todo el panorama del lugar, estaba sola en la barra mientras agradecía cada cumplido y felicitación de los demás invitados. Sus pies dolían, al igual que su cabeza. Quizá ya habían sido suficiente tequila por la noche. El reloj estaba por marcar las 3 am y ella seguía ahí, esperando, pero no terminaba de entender el porqué. Bueno, considerando que aún seguía en casa de Apolo sentada y bebiendo sola, entendía hacia dónde se dirigía la situación, pero no quería aceptarlo. Y demostraría su punto yéndose justamente ahora, solo debía buscar a su representante, Tom, para que la llevara a casa.
Al voltear, su mirada chocó con unos ojos azules, que la miraban desde lejos. Inconscientemente sonrió. ¿Cómo es que él...? El individuo se aproximó a ella, con una sonrisa triunfal, al parecer obtuvo la reacción que quería de su parte. Naomi bajó la mirada, dándose cuenta de su sonrisa y de esas mariposas en su estómago. Se maldecía por ser tan obvia, pero, ¿Quién en su sano juicio sería capaz de no sentir algo al ver esos ojos de azul cielo, esa sonrisa de dientes perfectos, su ancha mandíbula, su dorado cabello revuelto y...? Bueno, ¿Quién no podría ponerse a babear con este chico mirándola de esa manera? Sus manos empezaron a sudar. Apolo se detuvo frente a ella, abriendo sus brazos.
― ¿Sorprendida?
Alzó sus cejas.
Ella cruzó sus brazos, conteniendo su sonrisa en sus labios y mirándolo como si fuese poca cosa su presencia. Él bajó sus brazos.

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High Lies
AléatoireUn grupo de jóvenes con pedos mentales ocasionados por sus padres, se conocen y vuelven amigos. Fin. AU PJO/HoO