¡Radiante y Deslumbrante!

Capitulo 1

Capítulo 1 - ¡Ya basta, p-por f-favor...!

Luego de eso, todos abordamos el autobús y por suerte, este encontraba vacío, por lo que, dejando a las bestias aun lado, decidí sentarme lo más lejos posible de ellas, pero cuando fui a sentarme, rápidamente las chicas fueron tras de mí, y se sentaron cerca de mí.

Maldita sea.

Por mala suerte, la panda masoquista se sentó a lado mío, resignado, saqué un libro de mi mochila y decidí leerlo todo el camino.

—Ahora que lo pienso, Meimei, ¿No vino contigo Fong Fong? —pregunto Ranka curiosa.

—Uhm, sobre eso, dijo que estaría bien que fuera yo sola siempre y cuando no me separa de ustedes en ningún momento.

—Qué lástima, creí que vendría con nosotras, incluso compre un frotador solo para él, mirá. —Rápidamente, Ranka saco de entre sus cosas de su mochila, un pequeño flotador, sin aire.

—Ya veo, fufu, está bien, la próxima vez lo invitaré que venga con nosotras.

—Si, ¡Hagamos eso!

A pesar de lo ruidosa que eran Ranka y Meimei, seguí leyendo hasta el final, después de todo, no tenía ninguna intención de detenerme.

—Oye Meimei-senpai, ¿aun no te ha confirmado si vendrá Hitomi-senpai?

—Ohh es cierto, lo había olvidado, jeje. —rio apenada, al mismo tiempo que sacaba su teléfono para revisar. —Hitomi... Hitomi... Hitomi... —balbuceaba mientras buscaba a la mencionada en todos sus contactos. —Hum, creo que no le llegó mi último mensaje, le enviaré otro.

[Hitomi, ya estamos en el autobús, te mando mensaje cuando lleguemos ¿okey?]

—Aún no me contesta, ¿le habrá pasado algo?

Al decir esto, no pude evitar preocuparme por lo último dicho por Meimei, así que cuidadosamente saqué mi teléfono, sin llamar la atención de más chicas y decidí mandarle un mensaje yo mismo a Hitomi.

[Hitomi, ¿todo bien?, las chicas y yo, nos estamos preocupando por ti]

De seguro no tendrá señal... si la señal... no debo preocuparme, lo más seguro es que ella incluso ya esté esperándonos.

—Oye Meimei.

—¿Sí?

—Como se usa, lo que tienes en la mano.

—Ahh esto....

Después de esto, las chicas empezaron a hablar de cualquier cosa, mientras que, por mi parte, hacía como si leyera mi libro, pero lo cierto es que no podía dejar de apartar la mirada del teléfono, por si algún mensaje de Hitomi llegara de repente.

Los minutos pasaban y cada vez estábamos más cerca de llegar a nuestro destino, pero, aun así, no recibí ningún mensaje.

Cuando levanté la mirada, era hora de bajar, por lo que llamé la atención de las chicas y bajamos inmediatamente.

—Auch, duele estar sentada mucho tiempo.

—Nya tienes razón.

—Y como no si se la pasaron todo el tiempo brincando en el asiento, tch, ni siquiera pude leer mi libro por su culpa.

—Nyajaja, ¿crees que no me di cuenta, sobre lo que estabas haciendo?

—E-Espera no me digas que...

—Fufu, después de todo, sigues siendo un macho, no te preocupes, no se lo diré a nadie... ¿O si...?

—Déjate de rodeos.