Play Date¹ || Hyunin

two: strawberry shortcake

Jeongin era muy bonito, y todos lo sabían.

Probablemente, si no estuviera loco tendría muchos chicos detrás de él. Aunque estar mal de la cabeza tampoco le impedía tener chicos con la mirada puesta en él.

- Mira, por ahí va Jeongin. -

- Joder, yo me lo follaba. -

- Y yo. -

Los dos chicos (los cuales se llamaban Taeyong y Mark) se miraron entre si.

- ¿Y si...? -

Mark le susurró algo en el oído a su amigo, el cual asintió feliz.

Los dos se levantaron y fueron hasta el lindo chico de pelo castaño.

- Oye, Jeongin. - El chico volteó a verlos con su sonrisa de siempre. - ¿Vienes un momento con nosotros? -

- Sí. -

Los tres fueron juntos al baño, y ya allí metieron a Jeongin en un cubículo.

La puerta fue dejada abierta y Taeyong sacó su teléfono y comenzó a grabar, todo esto mientras Mark desvestía al chico.

- ¿Qué pasa? - Dijo Yang. Su sonrisa había desaparecido.

Mark se bajó los pantalones y la ropa interior para entrar rápidamente en el menor.

- Oye, tío. Deja un poco para mí. - Dijo el que sostenía el teléfono.

El castaño comenzó a golpear los hombros de quien estaba encima de él, pero este le dio un bofetón para dejarlo quieto.

- Para de una vez, zorra. -

Mientras aquel chico seguía ocupado en hacerlo sufrir, él buscaba algo con el que golpear o dañar. Entonces recordó algo.

Su navaja.

Hyunjin entró al baño y vio aquella horrible escena delante de sus ojos.

- ¿¡Qué mierda se supone que hacéis con él!? -

- ¿Qué pasa, tú también quieres? - Preguntó Mark.

Jeongin tomó la navaja y la clavó en uno de los hombros del contrario varias veces.

- ¡AH, MIERDA! - Gritó el canadiense adolorido.

La mente de Hwang dejó de funcionar hasta que Mark se vistió y se fue a la enfermería acompañado por su amigo. Jeongin seguía desnudo y pegado a la pared.

Una leve risa se logró escuchar. Pero luego esa risa se volvió histérica.
Las lágrimas de Jeongin bajaban por su rostro, pero aún así no podía parar de reír. Acababa de apuñalar a un chico en su hombro. ¡Genial!

- ¿Jeongin? -

Volvió a la realidad al escuchar la voz de su novio.

- ¿Jinnie? - Preguntó con su voz inocente.

Hyunjin le ayudó a vestirse y Yang limpió la navaja en el lavamanos. La sangre de Mark ahora bajaba por las tuberías.

- Ya está, todo está bien, ¿sí? -

Oh, Hyunjin. Nada va a estar bien si sigues follando con otros.