Capitulo 25

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Terminamos y salimos de la cafetería.

El me guió de la mano hasta el bosque.
Tenía miedo no sabía que me iba hacer.

Habíamos caminado mucho y estaba cansada.

—¿Cuanto falta Alex?.

—¿Vez ese cerró?—dice apuntando uno que estaba muy lejos y era muy alto.

—No caminare hasta ese cerro Alex—digo soltando su mano y cruzándome de brazos.

—Yo tampoco—dice riendo, se comenzó acercar a mí y me asusté. Tomo mi cintura y me apego a él.

—Alex...—digo mirándolo confundida.

—Tranquila solo confía en mi...—me apretó mas la cintura y en 3 segundos estábamos en la cima del cerro que había apuntado.

—¡Que mierda!—digo risueña mirándolo mientras él aún no me soltaba.

—¿Tayler no te contó que podíamos trasladarnos?.

—¡No!—digo nerviosa y riendo.

El me suelta y se da la vuelta.
Mire a mi alrededor y podía ver la ciudad y todo el pueblo.

—Que lindo—digo mientras estaba todo en silencio, solo se escuchaba la brisa del viento.

—Vengo aquí seguido desde que llegue, y me arrepiento de muchas cosas.

—¿De que?...—digo mirándolo y él se da vuelta para mirarme a los ojos.

—Cuanto me alimento de alguien, vengo aquí y pienso en todos los planes de vida que ellos podían tener, y en toda la gente que los amaba.

—¿Y porque los sigues haciendo?.

—Para seguir viviendo, si por lo menos no nos alimentamos de una persona al mes podemos morir.

—¿Y las bolsas de sangre?.

—Sirven para alimentarnos solamente, nuestro sistema es diferente.Tayler también tiene que matar para vivir, aunque no le guste

No dije nada y solo seguí mirando a mi alrededor.
Estábamos en silencio y Peyton vino a mi cabeza.
Él ha estado en mi cabeza estos días a pesar de todo lo que ha pasado.

—¿Porque lloras?—pregunta Alex sin ni siquiera yo haberme dado cuenta de que lágrimas caían por mi rostro.

—Perdón—digo limpiándome rápidamente las lágrimas.

—¿Es por Peyton?...

—Sii...

—Ven...—dice tomándome el hombro y abrazándome— Entiendo como te siente, pase por lo mismo ase 2 años atrás.

No dije nada y lo abracé más fuerte.
Alex era  mucho más alto que yo así que puede sentir como su corazón latía a mil.

Me separé de él y vi la hora, eran ya las 4:46pm.

—Ya nos tenemos que ir—digo mientras lo miro a los ojos muy cerca.

—Okey, te...te...tengo que tomar...—dice nervioso y apuntando mis caderas.

—¡Si!,si claro—le digo acercándome a él nerviosa.

Cuando puso sus manos abrazando mis caderas sentí que un frío recorrió mi piel.

En menos de 2 segundos ya estábamos a unos pasos de salir del bosque.
El me soltó despacio y nos alejamos lentamente.

Caminamos asía mi casa y vi que no estaba el auto de mi padre, ni el de mi madre y él de mi hermana tampoco así que concluí que solo estaba mi hermano.

Todo secreto Donde viven las historias. Descúbrelo ahora