Monster | JaeJun

🍒𝐶𝑎𝑝𝑖́𝑡𝑢𝑙𝑜 𝐼𝐼: 𝑌𝑜𝑢𝑛𝑔

El olar a sangre era tan recatado que sentía como sus huesos tronaban, mientras elaboraba un corte desde el cuello, pasando por el tórax, hasta llegar al bendito abdomen, múltiples veces le había tocado personas adultas, algunos niño que pasaron mucha mierda en tan corta vida, jóvenes que terminaban siendo víctima o más bien, apresados por el suicidio, y muchas cosas más que terminan en su manos por el hecho de estar muertas.

-Sabes, si estuviera vivo posiblemente hubiera hecho lo posible para acostarme con él, una vez- El azabache hizo una mueca de asco- ¿Qué?, es guapo, además estaba vivo estupido, no soy capaz de hacer necrofilia.

-Más te vale Hae, no me gustaría estar con alguien que mire más guapo a un cadáver que a su propio novio- El azabache se estremeció del pensamiento.

El de cabellos ondulados con un cabello cenizo comenzó a reír- Aunque, ¿Quién sabe?, ni cuenta te darías- El más alto nego de solo pensar eso.

-Tu conciencia te matará de pensar tantas cosas- El más bajo nego mientras se quitaba los guantes para besar al más alto.

-Tal vez si o tal vez no, poniéndonos serios debemos de hablar sobre la mutilación del más joven de los muertos, el simple hecho que le hayan arrancado las dos extremidades superiores es muy extraño, se está elaborando la prueba para poder identificarlo, lo más extraño de todo es que de alguna manera sólo el cuerpo de la mujer es reconocido, con todos sus datos, los demás tres no, solo tiene documentos simples como la partida de nacimiento, además de que el cuerpo tiene más de una semana de estar muerto, por lo tanto lo que te dijo el supuesto hermano no está muy enlazado a lo que pude descubrir, lleva probablemente entre 15 a 20 días muerto por el estado de putrefacción, deberías de profundizar más en la conversación de alguna manera te esta tratando de engañar, sin mencionar, bueno, no es extraño que este pendiente a una radio después de todo su hermanastro había desaparecido es normal, pero es un poco intrigante que te haya tratado de mentir sabiendo que un departamento de policías y forenses te resguardan- El menor seguía examinando los cuerpo- Poblamente tenga que ir a la embajada, para saber más acerca de esto, porque entre tener que tolerar a Jaehyun, además de compartir la investigación o tener sexo con este cadáver para luego suicidarme prefiero lo segundo.

El odio insano pero con muchos factores que tenia el moreno al mayor era sumamente grande, que sabia a lenguas que lo segundo era más real que pedirle ayuda Jung, el cual él mismo odiaba.

-Te lo permitiría- El más bajo río ante su afirmación.

-¿Sabes que es peor de ser un patán que no sabe si es gay?, es ser un homosexual y que le gusta meter polla en el primer hoyo que se encuentra- El menor había pedido el traslado de Seúl a Busan alejándose de todo lo malo que había quedado en aquel espantoso lugar, donde había decidido dejar los múltiples traumas que había tenido- Si hay algo más te avisaré, terminaré de investigar la prueba de ADN. Definitivamente vamos a solucionar este caso, no por nada somos los mejores en nuestros departamentos, Nono.

Los ojos del más alto emitieron aquellas sonrisas que iluminaban los días oscuros de DongHyuck.

-Te veré en casa, más tarde me quedaré a terminar el papeleo- El azabache negó de manera seria.

-Claro que no, tú, te vas conmigo, si te pasa algo probablemente haría algún delito por matar algún hijo de puta, así que lo mejor es que ambos nos vallamos- El cenizo asintió mientras cerraba la gaveta donde se encontraba el cuerpo de Lee Minhyung.

En algún momento en su vida solo una persona era la protagonista de sus sueños, a pareciendo de manera macabra mientras cortaba las tiras de piel, como si de algún tipo de papel se trataba, si jamás hubiera conocido a esa persona que no era tan humana, probablemente nunca hubiera conocido a Jeno u quien sabe, tal vez, su heterosexualidad seguiría fija, no es que amara el dolor, si no, es que en algún momento, antes que él estuviera en el ojo de la tormenta, todo había sido flores y arcoíris, pero ese fue el obstáculo que no lo quiso dejar ver la cruel y fría realidad, si hubiera sido más listo hubiera detenido a Jung, pero sabía que era imposible, no iba a menospreciar su carrera y mucho menos por un cero a la izquierda como el mayor; había decidido iniciar de cero construyendo su propia reputación, una donde sólo se encontraba viviendo la realidad en carne y hueso, no se permitiría cometer el mismo error.

Pero algo que había ganado durante esa experiencia tan traumática que vivió, fue su humor, uno que jamás se perdió y iba en escala porque ni Jung, ni nadie podrían quebrar a Lee DongHyuck, esa chispa que lo hacía unico, seguía viva y seguiría, pocas veces DongHyuck lloró, agradecía que hoy en su presente Jeno lo respaldaba, lo cuidaba y más que todo lo amaba, no se sentía avergonzado, el departamento de policía lo sabía y ni como tratar de intimidar lo porque Jeno con una mirada hacia estremecer al mismo departamento de policías y ahora DongHyuck era cono la mafia japonesa, uno podía salir sin un dedo por algo mal formulado.

Eso es lo que hacía única y perfecta su relación, la confianza que tenían, los personajes que participaban en esa relación.

-Sabes te amo, pero odio que cocines con cebolla los huevos, me incomoda comer huevos con cebolla, me hacen sentir intimidado como que me quieren arrancar el paladar o el gusto- El mayor río ante el tonto comentario.

-Debes de tener las defensas altas cuando tengas sexo con algún cadáver siquiera salir vivo cuando regreses- El mayor se había reído de su propio chiste.

-No se que me entristece más, tus chistes con poca gracia o tener que comer el huevo con cebolla- Ambos reían, había una gran diferencia de sus personalidades al estar solos y estar con personas, la mayoría de veces Jeno se encontraba a la defensiva pero era una de las personas mal dulces y aunque si frase dijera lo contrario, Jeno era una persona divertida.

Ambos eran buenos para el otro, se sentían salvos si de el opuesto de ellos se trataba, era algo que habían logrado gracias a sus propios esfuerzos.

Los delgados labios sacaban el pequeño humo que se había acumulado, se sentía mareada, miraba de manera perdida el horizonte pensado que era lo que había ocurrido los últimos meses, su vida había cambio, se sentía diferente, era diferente.

Todas las personas pedían que desapareciera, que se eliminara de la faz de la tierra pero solo tenía un objetivo y era terminar con todo lo que la había dañado, todo lo que habia destruido su vida, porque esas personas no merecían su perdón, merecían sufrir lo mismo que ella lo había hecho.

-Tú- Sus ojos giraron a la persona que tenía al lado- ¿Qué piensas?.

Mordió sus labios mientras buscaba una respuesta a la pregunta que le estaban haciendo.

-No lo sé, sólo estoy pensado que hacer con él- Apunto la caja mientras miraba de manera perdida el chorro de sangre que salía del interior de esta.

-¿Qué crees que es lo adecuado?, ¿Crees qué merece algo después de todo lo malo que te hizo?- Los ojos marrones se perdieron en los contrarios mirando de manera fija al contrario.

-Pero lo quiero, creo que merece morir enterrado, tal vez en la caja, así, vivo, creo que tiene un poco más de resistencia para estar vivo tres días o tal vez más, si eso es lo que él resiste- Levanto la caja mientras el pantalón azulón se ensuciaba- ¿Podrías ayudarme?.

-Recuerda que no tengo tanta fuerza como tú- Asintió para comenzar a cavar el agujero- Toma, abrió la caja sin el temor que se escapara al estar desmayado en el interior de esta- Un poco de agua, tal vez cuando llueva vuelvas a probar un poco de esta.

Cerro el agujero mientras el mayor cubría el agujero con un césped falso para incubrir la escena.

-Creo que muy pronto la policía se dará cuenta pero después de todo un día lo tendrían que hacer, lamentablemente creo que ese documento los está distrayendo un poco pero no tanto, pero no te preocupes que me encargaré de Jeno, luego de todo es el encargado de la investigación, pero hay que hacerlo parecer que lo hizo de manera propia, por su propia voluntad, llevara un poco de tiempo solo hay que darle un pequeño pero fuerte empujón- El menor asintió mientras miraba como no existía algún tipo rastro en el lugar, volviendo de esa manera su tranquilidad.

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Me disculpo por tanta tranquilidad, es una historia rápida, se que se siente un poco aburrida pero va a cambiar, de verdad.

No es lo que piensan, desde ahorita les digo, yo se lo que creen pero no es así (Referente a la trama de la historia).

Nos vemos en el próximo capítulo.

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