Sonó el timbre del recreo, todos salieron rápidamente y mi amiga se acercó.
DN: Voy pillando un baño.
T/N: Sí, cuando llegue te aviso, ¡corre! – me reí levemente al verla correr tan adorablemente – Que cute – dije para mí.
Rebusqué en mi mochila y cogí mi móvil. Justo cuando lo iba a esconder entre mi ropa sonó una sirena. Era un sonido extraño, no el que suele avisar que finalizan las clases o el simulacro de incendios, no, era una especie de alarma. Pronto el conserje tomó el micrófono y habló.
CJ: ESCUCHAD TODOS, POR UNA RAZÓN ACTUALMENTE DESCONOCIDA HAN APARECIDO UN GRUPO DE LO QUE SE CREE QUE SON ZOMBIES – se escucharon gritos – EL GOBIERNO DECRETA QUEDARSE EN CASA Y SALIR PARA LO ESENCIAL, COMIDA – para ese momento la clase ya se encontraba vacía, estando yo sola escuchando atentamente sus palabras. Encendí mi móvil, un mensaje por correo electrónico del Gobierno anunciando la alerta – POR FAVOR PREOCÚPENSE DE SUS VIDAS SE ACERCA UN APOCALIPSIS.
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