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El nerviosismo de SuYeon era evidente.

Sus manos sudaban, solo podía mirar su café y morder sus labios con desespero.

Miro a todos lados de la cafetería, al final, Jackson le había comentado que se verían ahí, para no hacer esto más incómodo de lo que ya se sienten ambos.

El sonido de la campana llamo su atención, pero un vez más, no era la persona que esperaba.

"Tranquila, nada malo pasará."

Tenía que confiar en ella y convencer al padre de que era la persona adecuada para cuidar del pequeño, DaeHyun. Con solo recordar al pequeño la hizo sonreír, hacía mucho que no cargaba a un bebé, y el hecho de volver a hacerlo, de volver a tener por lo menos un poco de aquel trabajo en el que tanto se esforzó, le hace sentir feliz.

Demaciado feliz.

La campana suena de nuevo y ve a un Jackson acompañado de alguien. Y esta de más decir que ese alguien tiene un muy buen parecer. Muy guapo, demaciado.

Sus manos sudaban más, como si eso fuera posible; las limpio con la tela de su jean y trago nerviosa. Alzó la mirada y se topó con los blancos dientes de Jackson, parecían salidos de un comercial de pasta dental.

Le devolvió la sonrisa pero más pequeña.

Acomodo un mechón suelto de su cabello y se levantó haciendo una reverencia.

Los modales ante todo.

- Pero mira nada más, SuYeon- las mejillas de la chica se volvieron rojas.

- Jackson, es bueno verte de nuevo.

Taehyung observaba los movimientos de la chica, no era tan baja de estatura. Su cabello negro ondulado caía por su espalda y hombros, el maquillaje ligero y sus facciones suaves fueron lo que más llamaba su atención.

Juraba que ya la había visto antes.

Hizo una reverencia y extendió su mano con respeto, la cual la chica no dudó en tomar.

Su mano era pequeña y cálida, los dedos rechonchos y sus uñas algo largas.

- Mucho gusto, Señor Kim. Mi nombre es Park SuYeon.

¿Park?

- Kim Taehyung- dijo sin dejar de mirarla, esos ojos-, me han contado maravillas de ti.

SuYeon miro a Jackson y este solo se encogió de hombros, no supo si lo hacía por ayudar o solo para ya no tener que cuidar al pequeño.

- Bueno, tengo experiencia- sonrió, y saco una carpeta de su amplio bolso.

Se la extendió al pelinegro y este la tomo.

A medida que leía, entendió el porque sabía tanto de bebés y sobre cómo cuidarlos.

Enfermera Neonatal. Interesante. Aunque Jackson, ya se lo hubiera comentado antes, Taehyung no tenía buena memoria.

SuYeon miraba con algo de nerviosismo el rostro del señor Kim. No sólo por lo guapo que era, si no por el hecho de que de él dependía si su renuncia escándalosa de su anterior trabajo valió la pena.

Esperaba renunciar de la manera más pacífica y amable que se pudiera.

Pero el imbécil del señor Kang, jamás entiende razones. Terminó siendo un tremendo revuelo, pero puedo descargar todo lo que se había guardado años. Al final, sabía que había echo una tormenta en un vaso de agua.

Jackson le dio una mirada cómplice.

SuYeon estaba que se comía las uñas de los nervios.

Y Taehyung leía con atención todo en aquella carpeta.

¡Hey, Love! →[Kth]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora