Capítulo 2

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Capítulo 2

(Mad World - The Legend Of Korra amv -

)


Todo a mí alrededor son caras conocidas sitios gastados, caras gastadas.
Listas y despiertas para sus carreras diarias hacia ningún sitio, hacia ningún sitio.
Sus lágrimas empañan las gafas inexpresivas, inexpresivas.
Oculto mi cabeza, quiero ahogarme en mi pena no hay mañana, no hay mañana.

En cierto modo resulta divertido, en cierto modo triste.
Los sueños en los que agonizo son los mejores que he tenido.
Resulta duro de decir, duro de aceptar cuando la gente camina en círculos.
Es un mundo desquiciado.

Niños esperando el día en que se sentirán bien.
Feliz cumpleaños, feliz cumpleaños. Programados para sentir en el modo en que deberían.
Siéntate y escucha, siéntate y escucha.
En el colegio estaba muy nervioso Nadie me conocía, nadie me conocía.
Maestro dime cual es mi lección mira a través de mi, mira a través de mi.

En cierto modo resulta divertido, en cierto modo triste.
Los sueños en los que agonizo son los mejores que he tenido.
Resulta duro de decir, duro de aceptar cuando la gente camina en círculos.
Es un mundo desquiciado.
Amplia tu mundo.
Mundo loco.

Una molesta Korra se encuentra en el patio trasero de su casa lanzando algunos de los balones que utiliza para practicar con su papá cuando no está entrenando en el campo de juego estrujando los pobres balones con ambas manos sin ningún propósito de entrenamiento; la furia está consumiendo pensamiento ante las evasiones de Asami en los últimos días pero si a eso le une la clara desesperación que tiene por desahogar todos los sentimientos negativos que invaden su cuerpo con todos los acontecimientos posteriores al deceso de Opal puesto que su proceso de luto no ha sido completado debidamente al no derramar las lágrimas necesarias que podrían limpiar su dolor interno hasta que siente el tímido líquido comenzando a resbalar por sus mejillas y se da cuenta de que no puede seguir guardando todo ese dolor lanza el último balón y el impulso le hace sobre sus rodillas en verde pasto mientras que los pequeños ríos desciendan de manera inevitable doblegando su orgullo interno mientras su mente trae ante ella los recuerdos del lindo rostro de la tierna Opal.

Empuña ambas manos cuando la ira y la impotencia le hacen ver la realidad de que ella, su querida Opal, ya no volverá a dedicarle esa tímida sonrisa que le ha dado cuando ha recibido un cumplido de su parte o el gesto nervioso de mano para acomodar el mechón rebelde de su cabello tras su oreja cuando le miraba fijamente de una manera enamorada; esos tiernos y brillantes ojos verdes no le dedicarán la mirada animándola en cada partido en su diminuto uniforme de porrista ni tampoco le esperará al final para darle su tan ansiado beso por la victoria, por ser la mejor jugadora o el premio de consolación para levantar su ánimo tras una derrota.
Siente la soledad y perdida estrujar su corazón sin piedad pero lo que le frustra es que ha podido haber pasado todo el tiempo que la etapa casi final de su enfermedad les hubiese permitido de no ser por esas salidas y citas que la habilidosa Opal ha preparado para ella y Asami en esos mismo meses es que ha escondido la verdad de todos, esas citas…

¿Por qué ahora que recuerda el tema de las citas su corazón siente menos dolor y su cuerpo reacciona de una manera traidora deseando la compañía de la joven pelinegra que ahora no quiere verla? ¿Por qué la forma amistosa en que la ha visto a Asami como amiga ha cambiado de pronto y le duele el rechazo a su compañía? ¿Estará confundiendo ciertas emociones y sentimientos en ese momento de flaqueza y debilidad?
Golpea un balón cercano a ella mientras su cuerpo cae hacia adelante apoyando su manos para sostenerse sobre sus brazos clavando sus orbes azules en el color verde del pasto como si este fuese a responder sus dudas, su expresión ahora un poco más serena trata de comprender lo que está pasando pero sabe que no hay mucho que entender y que por más preguntas que haga, es como hablar con el viento pues no obtendrá respuesta.

Una Novia Para Mi NoviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora