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Cuando Sehun entró a la casa lo primero que pensó fue que su profesora ganaba buen dinero. Por ahí decían que los profesores morían de hambre, vaya mentira.

Un pequeño perrito lo recibió, parecía ser un pomerania, a Sehun le encantaban los pomeranias. Cuando iba a tomarlo en brazos, un pequeño gato gris llegó y le maulló, parecía ser celoso. La imagen era tierna, nunca había visto a un gato conviviendo con un perro. Junmyeon se acercó a ambos y estos se le abalanzaron encima, el pequeño cayó de espalda contra el piso sonriendo por la felicidad que sus mascotas le brindaban.

Sehun sacó su teléfono y tomó una foto sin que se diera cuenta. Sería su más grande tesoro.

La madre de Junmyeon llegó unos minutos después, le saludó y dijo la típica frase "Mi casa es tu casa" , a Sehun nunca le habían dicho eso.

Subieron pronto ambos muchachos. Las escaleras parecían casi infinitas, sus piernas estaban cansadas de tanto alzarse por el esfuerzo.

Fue placentero entrar a la gran habitación, iba decorada con póster de varios grupos femeninos, películas y anime.

Tierno, pensó

Un ruido como una rueda le llamo la atención, en un estante había un pequeño hámster de color café con blanco, andando por toda su pequeña casa. Sehun se acercó a él y esté le miró, el hámster posó la patita contra el cristal y Sehun hizo lo mismo con su dedo.

Sintió un picoteo, Junmyeon le llamaba.

Le gustaste.

- Sabes? Me haces recordar a esa película, Bolt. Un perro, un gato y un hámster.

Ese era el propósito, es mi película favorita.

Sonrió con los ojos y Sehun casi se derrite por la dulzura que desbordó su amigo en esos momentos.

Silencioso • [SeHo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora