La puerta de la casa de los Tweak fue abierta con suavidad, daban ya las 2 de la mañana, dos figuras trataron de pasar sin hacer ruido alguno, la mujer tomó el control de la tele para apagarla. -¿Quién...? Oh, hola señora Tweak. -Hola Craig. Susurró esta mostrando una suave sonrisa, mirando con inmensa ternura como ambos chicos yacían acurrucados juntos en el sofá de la casa. Craig se acomodó tratando de no mover en lo más mínimo a su acompañante y se levantó, tomando al rubio en brazos para subirlo al cuarto que ambos compartirían esa noche como las demás. -Lo siento, me quedé dormido antes de lo planeado... -Si, tranquilo, creo que mi esposo ya se acostó, así que rápido, ve. -Craig asintió y con toda la paciencia del mundo subió las escaleras, cuidando en todo momento de no perturbar el sueño de su amado, al cabo de unos pocos minutos ya se había acomodado en la cama junto con el más bajito y procuró dormir, esta vez debía madrugar si no quería ser descubierto poniendo la carta en el casillero.
[...]
Tweek fue despertado por su madre, esta lo movía con poca fuerza. -Tweek... cariño, vas tarde a la escuela. -el chico saltó tan fuerte en la cama que pensó que se estrellaría contra el techo y moriría sin haber completado su proposito. -¡GYAH! ¿¡Y Craig!? -Ya se ha ido, dijo que tenía que llegar temprano a la escuela hoy, así que le di el desayuno y se marchó... aunque... - Una risilla pícara se escuchó por parte de Hellen. -¿Qué pasa? -Esta miró a su hijo con una cara completamente tenebrosa, para inmediatamente cambiarla a una que hacía a¿parecer que era presentadora de uno de esos típicos y molestos programas de chisme. -¡Volvió a hacer lo del beso y te dijo te amo...! -Tweek sonrió y sintió como su rostro usualmente pálido se teñía de rojo intenso. -¡Ah! M-Mamá, te dije que no podría hacer eso. -Tú piensa lo que quieras Tweek, yo dije lo que vi. -Dijo esta riendo por lo bajo, estaba más que enterada que el primogénito mayor de los Tucker aspiraba a estar con su hijo, esta esperó a qué el chico saliese disparado de su cuarto, escuchó la puerta de entrada azotarse estrepitosamente y entonces lo recordó.
Una vista muy rara se presentaba ante los padres de Tweek, Craig Tucker se había quitado el chullo azul y los sostenía entre sus sudorosas manos, demostrando que estaba nervioso, el chico levantó la cara muy avergonzado y con las mejillas teñidas en carmín puro. -¡Señores Tweak! Y-Yo... -Hellen levantó una ceja extrañada por el comportamiento del mejor amigo de su hijo, normalmente inexpresivo cuando no se trataba de Tweek o su mascota Stripe. -¿Qué ocurre? - Preguntó Richard con una leve sonrisa, trataba de hacer sentir cómodo al chico para que tuviese la confianza de decirle lo que necesitaba, pero al ver Hellen que era lo contrario le indicó con la mirada que saliese un momento, él entendiendo se levantó y se excusó. -Lo siento, iré a preparar café.- Una vez estuvieron solos por completo Craig levantó la mirada y habló de manera tímida. -Señora Tweak, permítame cortejar a su hijo. -La progenitora del rubio sonrió complacida. -Ya era hora de que te decidieras, tienes toda mi aprobación y apoyo, pero, ¿Cómo lo harás? y entonces, Hellen Tweak vino a enterarse del plan que se llevaría a cabo en poco tiempo.
Pero hacía ya unas dos semanas de eso, y actualmente Tweek llega a la escuela a tiempo por un minuto de sobra, con rapidez abrió su casillero y sacó con desesperación sus cuadernos, encontrando el tan anhelado papelito, doblado con mucho esmero, él se dirigió al salón y entró, buscando con la mirada a su mejor amigo, dirigiéndose de inmediato a él y se inclinó para dejarle un besito en la mejilla en forma de saludo. -Hola Craig. -Hey... no me dí cuenta cuando entraste. -Si... ¿Por qué te fuiste tan temprano? Pudiste quedarte algo más... o despertarme.... el moreno sonrió levemente y acarició el cabello del rubio. -Lo siento, es que, hoy traje a Stripe, fui por él a mi casa bastante temprano. -Dijo para sacar al cuyo del bolsillo de su campera y entregarlo a Tweek. -Te toca cuidar a nuestro hijo esta semana, ¿Lo olvidaste? -Tweek sonrió y acarició el lomo del pequeño animal, riendo nervioso. -Eh... si... lo siento, es que con esto de las cartas de amor y eso no me he podido concentrar bien... -Acercó el cuyo a su rostro y le mostró una sonrisa amorosa. -Lo siento Stripe, mami no volverá a olvidarte jamás...-Craig llevó una mano a su pecho y sonrió enbobado. -¡Ya háganlo oficial! -Gritó Clyde y recibió un golpe en la nuca de parte del chico Black. Tweek avergonzado fue a su asiento y se sentó allí, jugando con Stripe hasta que Mr. Garrison o un sustituto llegase. Pasaron un par de minutos y el hombre entró y comenzó a dar su clase, si así se le podía llamar. Tweek, sacó rápidamente la carta y se dispuso a leerla.
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͟Te͟ ͟Es͟c͟r͟i͟b͟i͟ ͟Mi͟ ͟Al͟m͟a͟ ͟En͟ ͟Fr͟e͟b͟r͟e͟r͟o͟
Random*•.¸♡ Tweek encuentra una carta en su casillero el primer día de febrero, hay un juego que está decidido a ganar a toda costa, encontrar a su enamorado secreto con cada pista que se le vaya dando en las cartas, ¿Podrá lograrlo en 28 días? ♡¸.•* ᴇsᴛᴇ...