Los Lupin en Hogwarts

III

La lluvia caía con fuerza sobre los terrenos de Hogwarts, Minerva miraba por una de las ventanas del castillo, cuando se levantó, había planeado estudiar unas horas en la biblioteca y después salir a dar un pequeño paseo, pero ahora, esos planes estaba completamente arruinados

—Eso me pasa por encerrarme en la biblioteca toda la mañana – gruño suavemente

A diferencia de ella, Katie había preferido hacer las cosas al revés, dar una vuelta y luego entrar a estudiar un rato, en ese momento, sentía un poco de celos por su amiga

De repente, poso su mirada en una figura en medio de los amplios jardines, un chico sentado, mirando a la nada, a Minerva no le costó trabajo reconocerlo, así que comenzó a a correr a las escaleras, bajandolas rápidamente y dirigiendose a la puerta

¿Que hacía ahí en medio de una tormenta?

Nego varias veces al estar parada en la puerta, mirando al chico con más claridad, suspiro y se abrazo a su misma, antes de comenzar a caminar hasta el solitario chico, con una leve mueca, no le gustaba mucho la lluvia, la odiaba a decir verdad

—Que haces aquí?

Oliver levantó la cabeza, tenía los ojos rojos y temblaba por el frío

—Pensar – su voz sonaba apagada

— Pensar? En qué? – se sentó a su lado

Se limitó a encogerse de hombros

—Liv, se que apenas nos conocemos, pero, sabes que puedes confiar en mí, pase lo que pase

El chico asintió

—Mi padre me escribió, últimamente están peleando demasiado, quizá se separen – miro al cielo – realmente podría decir que no me debería afectar, pero, ellos...era lo que yo veía cómo buena relación perfecta, se veían felices uno con el otro

La castaña no sabía que decir exactamente, nunca había estado en una situación así y dada su situación familiar, era complicado que su padre pasara por un divorcio

—Tambien me dijo, que estás navidades, lo más probable es que pasen navidad separados, así que debo elegir con quién estar – mordió su labio – no quiero hacer eso, no quiero elegir entre mis padres – negó – me niego rotundamente

—Antes peleaban mucho, cómo ahora?- el chico negó nuevamente – entonces, esperemos que sus problemas se resuelvan y no pase el divorcio – suspiró– quizá solo sea una mala racha

—Tu crees? – una pequeña esperanza se iluminó en los ojos que hasta hace unos momentos, derrochaban tristeza

—No lo sé,no conozco bien la situación de tu familia  pero nunca está de más tener esperanza – se encogió de hombros – tampoco le des muchas vueltas, no te pongas así de mal, deja que ellos arreglen sus problemas y encuentren la mejor situación

Oliver solo asintió con la cabeza, Minnie recargo su cabeza en el hombro del chico, el cuál, acomodo su cabeza sobre su amiga, ninguno dijo nada más, solo se quedaron en silencio, escuchando la fuerte lluvia caer sobre ellos

Quizá, a Minerva le empezaba a agradar la lluvia.

*

Estornudo con fuerza, bufando suavemente mientras limpiaba su nariz, se encontraba en la enfermería con un gran resfriado

—Pero la niña quería salir en día lluvioso – negó Katie

—Queria ser buena amiga – su voz sonaba graciosa por su nariz algo tapada

— Si, buena amiga y ese bastardo de Wood no se aparece por aquí

—Estuvo aquí a primera hora, junto a Percy

—Bueno, eso cambia un poco la cosa– bufó suavemente

—No te enceles – miro divertida a su amiga – por ti, cruzaría en lago nadando

Katie sonrió con dulzura

—Eres un encanto Minerva Lupin – dio un fuerte y caluroso abrazo a su amiga

—Lo sé, lo sé, soy lo mejor – guiño un ojo

—Que tampoco se te suba mucho – revolvió el cabello de su amiga

—No te puedo prometer nada, querida– se encogió de hombros

La chica solo puso los ojos en blanco, acomodandose en la silla junto a la camilla de la castaña

—Me dirás que tenía Olivier?

—Son temas familiares, de los que no te puedo platicar, lo siento

—Bien, no me hables de la familia de ese mequetrefre , háblame de la tuya, hay algo que me da mucha curiosidad

— Que te da curiosidad? – la miró curiosa

—Tus padres, son hombres, cómo es que ellos...bueno, para que Nazca un bebé...

Minerva soltó una leve carcajada

—Eso es sencillo, existe un centro, dónde acuden brujas embarazadas que lamentablemente no podrán cuidar a sus bebés, así que contactan a familias que no puedan tener hijos, entonces, una vez que los futuros padres son elegidos, se toma un poco de sangre de cada uno, se hace una muy extraña poción que debe beber la embarazada

—De esa forma, el pequeño tendrá genes de los pases adoptivos, no?

—Exacto – asintió – ellos se encargan de los gastos de la mujer, hasta este lista para dar a luz, mi tío James, fue quien descubrió este centro y les contó a mis padres, hicieron todos los trámites una vez, pero Sirius quería más de un hijo, así que convenció a papá

— Parece tener un gran poder de convencimiento – rio suavemente – tu infancia con padres así, debió ser divertida

— Pues – se removió incómoda en la cama – papá siempre jugaba con nosotros, cada que podía nos leía y aveces me quedaba con mis abuelos, eso también era divertido, tienen un gran jardín y Sirius...es otra historia

— Por que lo llamas Sirius? – ladeó la cabeza con curiosidad

—No lo conozco bien, deje de verlo a los dos años – miraba sus manos

—Oh – miro a Minerva, apenada – lo siento

—Descuida, no me quejo, mi papá es increíble – una sonrisa soñadora se dibujó en sus labios

— Tienes algún recuerdo de Sirius? – mordió su labio, esperando no incomodar

—Pocos, la verdad, soy muy borrosos y parecen un sueño – suspiro y está vez, dirigió su mirada al techo – es de mi segundo cumpleaños, es un recuerdo muy vago, pero por alguna razón, sigue en mi memoria

— Quizá fue un muy especial cumpleaños

—Fue el último en el que estuvimos todos juntos – mordió su labio con suavidad, tratando de no ponerse triste

—El...los abandonó? – Sujetó la mano de su amiga con suavidad

—Si, bueno, no – miro de reojo a Katie – no sabemos bien que pasó, pero papá dice que es buena persona y que aún lo ama mucho, así que, supongo no

Nuevamente miro al techo, no quería contar que su padre estaba en Azkaban, en primera por ser un tema privado de su familia y, que ella creía no debía estar divulgando, en segunda, al no saber las causas del encarcelamiento de Sirius, tenía ser juzgada de mala manera por ser su hija

—Cambiemos de tema, si? – fingió una sonrisa – mejor hablame de tu familia

Y eso hicieron por un buen rato, Katie le platicaba sobre sus padres, cómo era su vida antes de hogwarts y lo triste que estaba, por no poder pasar navidades con ellos, ya que tendrían que viajar