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Kelly

En la cena

Al llegar a el salón veo que hay una mesa con cuatro asientos, en ellos están Justin y betth, jax toma asiento en uno de los puestos vacíos y justin me indica que me siente en el otro.

Eso hago, me siento y el levanta una copa en señal de brindis.

Betth le regala miradas a justin pero el no las nota, ella me ve y me regala una mirada de odio.

Auch, directo a mi pobre corazón.

_ bien, quiero hacer un brindis -dijo justin sonriente- por mi reina,mi kelly.

Un frio me recorre por mi espalda y el sentimiento de asco se instala en mi estomago.

Todos alzan su copa y jax me hace seña para que yo hiciera lo mismo.

Con mis manos cojo la copa y la alzo formando una de mis mejores sonrisas falsas.

Después del brindis todos nos sentamos y cuatro chicos entran con unas bandejas, las cuales dejan en la mesa.

_y como te has sentido -dice Justin- todo cómodo? Esta es tu casa y lo que más quiero es que sea cómodo para tí.

_bien, todos me han atendido muy bien...-trato de no decir nada pero fallo en el intento- y si se ha hecho muy cómodo el hecho de que estoy secuetrada contra toda mi voluntad y atrapada en un lugar con la persona que más desprecio en este mundo -termino mi pequeño discurso con sonrisa- en pocas palabras, si de hecho se me ha hecho muy cómodo.

Silencio es lo que acompañan a los cinco minutos más largos de mi vida hasta que jax ríe.

_esta chica si que es graciosa ¿no?.

Frunzo el ceño hacia jax, el cual se seguía riendo.

_ a mi no me parece graciosa en lo absoluto- dice betth.

_muy graciosa -murmura justin- bien, será mejor que empecemos con la cena.

Apenas pude probar algo, todos estaban comiedo y escuchado las historias de justin.

_ kelly, después de la cena me gustaría que fuéramos a caminar un rato- dice justin.

_claro, como si tuviera otra opción -digo.

Caminar, podría ser la oportunidad de escapar, pensé.

La cara de justin en una expresión clara de enojo y frustración, beth con claro odio y jax con una expresión neutral. Los dos primeros habían tocado apenas la comida en cambio este último se terminaba su plato con una satisfacción parecida a la de un niño.

Quien rompe este silencio es jax.

_que hay de postre? -dice el como un niño.

Esto me causa tanta gracia que quiero romper a reír pero me contengo.

_saben fue una linda noche, creo que me retiraré -me levanto y justin hace lo mismo- no, ya se donde queda mi habitación no hay necesidad de acompañarme ni de un escolta.

El me lanza una mirada enfadada y hace caso omiso, le ordena a jax que me lleve a mi habitación y este lo hace.

En el pasillo decido hablarle a jax.

_no necesito que nadie me lleve a mi celda.

El apenas me ve.

Alzo una ceja y lo sigo.

Llegamos a mi cuarto y el abre la puerta.

El lindo cuarto estaba sumido en una oscuridad total, apenas se veía el tenue brillo del balcón, el cual estaba tapado por una gruesa cortina.

LightroomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora