cap.2: baño

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Luego de alimentar a los cuatro niños, los mandó a bañar, lo que había olvidado era que los más pequeños no podían por su cuenta, así que decidió bañar a los dos niños... al mismo tiempo.

Espero que los dos mayores se durmieran, para poder bañar al par de niños de tres y un año.

Bruce tomó a los dos pequeños y les sacó lo único que los cubría, al principio los niños no dijeron nada pero en cuestión de minutos, ambos reaccionaron y empezaron a quejarse.

El pequeño Damian empujaba a Tim con todas sus fuerza, mientras repetía una y otra vez la palabra "ño".

En el caso de Tim, este solo traba de ponerse de nuevo la remera que lo cubría, y salir del lugar, pero digamos que no lo consiguió.

Ya que Bruce, cargo a ambos niños y los metió al agua.

Damián empezó a quejarse y mover en forma de berrinche, mientras que Tim se hundía en el agua para ocultar su vergüenza.

- Damián quédate quieto- pidió Bruce con toda la paciencia del mundo mientras traba de bañar al nombrado.

Tim empezó a jugar con la espuma que había en el agua, al punto que se metió un bocado de espuma a la boca.

Bruce se dio cuenta tarde lo que hizo el pequeño de tres años, solo suspiro cansado. Pero luego cambió su expresión al ver que Tim estaba apunto de llora.
Lo cargo en sus brazos, mojando toda su ropa en el proceso.

Damián miraba todo expectante, sin decir nada con una de sus manitas dentro de su boquita.

Mientras que Tim solo soltaba pequeño sollozos, en serio Bruce se preguntaba porque era tan llorón el niño de tres años, hasta que su mente le recalcó la palabra "TRES AÑOS".

- sabe feio- dijo el niño de tres años mientras escupía.
- ¿porque comiste espuma?- pregunto Bruce, mientras acariciaba la espalda de Timmy.
- po' eh parechia algodón de azúca- dijo el niño mientras que con sus puñitos limpiaba sus lágrimas.

Bruce solo suspiró y lo volvió a poner en el agua, junto con Damián.
El cual al ver a su padre, le estiro los bracitos, exigiendo que lo cargara, cosa que el mayor negó, pero al ver como este amenaza con llorar lo hizo.

- Paaa- dijo Damián mientras miraba a Bruce con el ceño fruncido.
- ¿qué sucede Damián?- pregunto curioso el mayor por la actitud del más pequeño.

Al no recibir respuesta vuelve a meter al niño al agua, y los sigue bañando.

Se sorprendió un poco por la maca de nacimiento de Damián que estaba en su nalgita (gente lo de las marca no las tienen solo mande fruta porque pensé que sería lindo) y a decir verdad era la primera vez que la veía, mientras que Tim tenía un lunar en la pelvis.

Luego de bañar a los dos niños, los dejo jugar un rato en el agua, observo como estos dos tenia una conversación amistosa sobre quien sabe que.

Un rato después los sacó de agua y los envolvió en toallas.

Los sentó en las cama y buscó ropa para ambos, consiguiendo solo remeras que eran lo suficientemente grandes para cubrirlos por completo.

Los pequeños se notaba sumamente cansados por el baño, se notaba como Tim luchaba por mantener los ojitos abiertos, mientras que Dami mordía su piecito hasta que darse dormido.

Bruce soltó un suspiro, sabía perfectamente que los niños necesitaban ropa y pañales, pero no quería dejarlos solos y  como Alfred no estaba, espero que se durmieran, pero aún así se sentía intranquilo en dejar a un grupo de niños solos.

Pensó un poco y decidió dejar a los cuatro en un cuarto con cámaras de seguridad y con los dos perros para que los vigilen.

Se puso una campera, gorra y pantalón deportivo con tenis, para ir a comprar.
Entro a un supermercado para los pañales.
Fue un par de minutos pensando que pañal comprar, hasta que fue ayudado por una mujer de unos veintisiete años, la cual le indicó los pañales para el bebé y le recomendó que al niño de tres le ponga un pañal a la noche para evitar accidente.

Su mente le preguntaba por qué había tantos tipos de leche, volvió a tener problemas, hasta que un empleado de dieciocho le indicó cual era la mejor leche para cada uno de los niños.

Luego de comprar la leche para los niños, los pañales, se dirigió a la caja para pagar y seguir para comprar la ropa.

Subió al auto y buscó un lugar donde vendan ropa para niños, hasta que lo encontró luego de casi una hora.

Niños otra vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora